¡Lo que más me gusta es el ruido! ¡Es increíble! ¡Son unos valientes!» Míchel tenía que hablar a gritos dentro del ´box´ del Aspar Team para hablar con su tío Manolo. La persona, junto a su amigo Héctor Faubel, que le inculcó hace muchos años su pasión por el mundo de las motos. Los dos cogieron el coche desde Burjassot, rumbo al Circuito Ricardo Tormo de Cheste, y pudieron disfrutar de los entrenamientos oficiales de Moto 3, Moto 2 y Moto GP donde pocos pueden hacerlo, en el interior de la sala de máquinas del equipo de Aspar. Entre neumáticos, chasis, mecánicos, pantallas indescifrables con los números de la calificación, cascos, monos, olor a gasolina... ¡y escudos del Valencia! Míchel comprobó en primera persona el nuevo ´look´ valencianista de las motos 'Aspar' gracias al acuerdo de colaboración, de cara a 2014, que se ha puesto ya en marcha en este Gran Premio. Desde ayer el mundo del motor le gusta un poco más. Hoy les animará en carrera como si fuera su equipo.

Míchel saludó a todos los pilotos del equipo. Estuvo con Randy de Puniet, Aleix Espargaró, Jordi Torres, Eric Granado, Jonas Folger y, sobre todo, a Nico Terol, con el que posó para SUPER encima de la moto. Además, conoció algunos de los entresijos del mundo del motociclismo gracias a Jorge Martínez Aspar. Ambos se felicitaron por el convenio de colaboración segundos antes de que empezaran a rugir las motos. Fue ahí cuando Míchel empezó a disfrutar de verdad. «Esto es increíble, disfruto mucho viendo las motos. Me he sentido un privilegiado estando aquí dentro en el box con los pilotos. Me apasionan las motos y ahora todavía más que veo que llevan el escudo del Valencia». El mediocentro acudió en compañía de su tío Manolo, un motero de los buenos´. «Mi tío Manolo es motorista desde pequeñito, tiene muchas motos y le encantan, él me ha inculcado este mundo. He tenido la posibilidad de traerlo para que esté aquí cerca y para mí es una ilusión también ver que el disfruta. Ha alucinando como yo y creo que no va a olvidar este día nunca». La otra persona que le ha metido el gusanillo de las motos a Míchel ha sido su amigo Héctor Faubel, quien le acompañó en su presentación en verano en el Parque de La Granja de Burjassot. «Me gusta la velocidad, el ruido del motor, soy un apasionado de los motores de coche y de moto y tengo buenos amigos motoristas, sobre todo Faubel, con el que tengo una buena amistad. Le he seguido siempre», aseguraba.

Lo que más le gustó a Míchel fue el ruido de los motores. «Lo que más me gusta es el ruido, el ruido me vuelve loco. Es lo que más me impacta, luego también es increíble la mecánica. ¿Cómo es posible que te puedan desarmar la moto en dos segundos? Te la montan, te hacen los que sean... Son mecánicos de un nivel espectacular». El futbolista siente pasión por el ruido, pero sobre todo admiración por los pilotos a los que califica de «valientes». El fútbol parece un juego de niños al lado de estas velocidades vertiginosas y medidas de seguridad sobresalientes. «La moto es más peligrosa que el fútbol, no hay duda. Yo los admiro a los motoristas por la velocidad que van, por como cogen las curvas tumbando prácticamente la moto, es impresionante la valentía que tienen». Hoy hay fútbol, pero por la mañana habrá tiempo de disfrutar de las motos. Míchel apoyará al Aspar Team y al resto de españoles. «Están dando guerra en el Mundial desde hace muchos años y los sigo porque me hacen disfrutar», dice.