La dolçaina ya no suena en Mestalla, al menos no lo hizo en el primer partido de la Liga que disputaron en el coliseo valencianista el Valencia CF y el Málaga durante el minuto de silencio en memoria de todos los socios valencianistas fallecidos en el último año. La sustitución de la dolçaina por el sonido de los violines causó cierta sorpresa en muchos de los asistentes al encuentro, quienes recuerdan que desde la temporada 2001 el sonido del instrumento popular valenciano era el que sonaba en los minutos de silencio.

El más contundente en la protesta ha sido Manuel Camarasa, presidente de la Federación de Folclore de la Comunitat Valenciana, quien expresa «repulsa total» a esta decisión. El responsable de este colectivo que agrupa a más de 200 entidades culturales de la Comunitat Valenciana ha señalado que «durante la presidencia de Jaume Orti en 2001 y con la colaboración de dos grandes valencianistas como Paco Real y Toni Company se trabajó para buscar una música que representara el sentir de los miles de aficionados y socios valencianista. No fue una tarea fácil, pero se encontró una sintonía parecida al sonido de un llanto que refleja el sentir por la pérdida de un socio». Camarasa manifiesta su profundo malestar con la eliminación de la dolçaina en el minuto de silencio porque «es un instrumento que nos identifica con nuestras raíces y no se puede jugar con la sensibilidad de un pueblo».

Jaume Orti ocupó la presidencia del Valencia CF durante el periodo entre los años 2001 y 2004, cuando se instauró esta tradición en Mestalla. Reconoce que, efectivamente, durante su mandato «se estableció que el sonido de la dolçaina uniese el sentimiento de todos los valencianistas en los minutos de silencio». El ex mandatario recuerda de manera especial «el trabajo que desempeñaron tanto Toni Company como Paco Real», a los que se sumó el de la Federación de Folclore.

La decisión del Valencia no ha gustado como es lógico al presidente de la Federació Valenciana de Dolçainers i Tabaleters, que reúne a más de 70 agrupaciones de la Comunitat Valenciana. Joan Trilles ha señalado que suprimir el sonido de la dolçaina en el minuto de silencio en Mestalla «es un error, el fútbol y la música tradicional no tienen que estar reñidos porque crea empatía en la gente del pueblo». Trilles añade también que las bandas de música son un bien de interés cultural y los desfiles en el estadio de Mestalla eran un hecho singular.

La Federació ha señalado también que el próximo día 20 de septiembre en Sant Vicent del Raspeig (l´Alacantí) se celebrará una nueva edición del encuentro anual de tabaleters i dolçainers con diversas sesiones de debate y presentación de la ponencia ´la dolçaina: recorregut històric i tractament de la canya´, a cargo del profesor Vicent Sanz. Además, el encuentro incluye pasacalles y conciertos durante todo el día en este municipio alicantino.