La llegada de Enzo Pérez pende ahora mismo de un hilo que cada vez es más fino. En las últimas horas se han tensado las posturas en la negociación por el argentino y al cierre de esta edición la operación estaba prácticamente rota. Hasta el punto que inicialmente en la jornada de hoy estaba prevista una reunión en la que iban a tomar parte los actores principales de la sociedad Meriton Holdings, el Benfica y el Valencia para cerrar el traspaso de una vez por todas pero se ha cancelado. A pesar de la voluntad del futbolista de jugar en Mestalla y del nivel de compromiso que han adquirido los dirigentes del Valencia con él, las negociaciones podrían haber encallado de forma definitiva y si en las próximas horas no se produce una llamada desde Lisboa en la que se reavive el pacto, Enzo Pérez no jugará en Valencia.

Tal y como ha informado SUPER en los dos últimos días, el plazo del Valencia para cerrar la llegada del centrocampista no iba más allá del martes. Si no se produce el fichaje de Enzo, el Valencia ya tiene 3 o 4 nombres encima de la mesa para buscar un sustituto de garantías en el mercado. Se busca otro Enzo. De hecho, en la jornada de hoy se van a producir ya reuniones importantes en el club para detectar los principales objetivos para llevar a cabo las contrataciones en las que incluso está previsto que esté presente el entrenador, Nuno Espírito Santo. Ayer ya hubo una primera toma de contacto entre Rufete, Joan Salvans y Fabián Ayala, los tres representantes de la secretaría técnica del club.

Hoy ya no va a haber más contactos con Enzo. La operación depende única y exclusivamente de la figura de Luís Filipe Vieira, presidente de Benfica, que ha puesto cantidad de trabas desde que el Valencia contactó con el club lisboeta por primera vez. A pesar de que hace algunas semanas mantuvo una cena en un restaurante de Madrid con Peter Lim -y sus respectivas mujeres- y estrechó su mano acordando el traspaso del futbolista en 25 millones de euros más otros tantos en concepto de variables asequibles, el dirigente portugués se ha desmarcado esta semana pasada pidiendo 30 millones de euros, el valor de su cláusula.

Por una cuestión propagandista, más que nada. Benfica lo ha vendido todo este verano y no quiere que la afición le cuelgue la etiqueta del hombre que desmanteló al equipo que quedó subcampeón de la Europa League. Habida cuenta que la relación de Vieira, Jorge Mendes y Peter Lim se resuelve en términos tan estrechos como que Benfica ha vendido en las últimas semanas a tres juveniles -Cavaleiro, Bernrdo Silva y Cancelo- que entre todos ni siquiera han jugado una hora en la primera división portuguesa por un montante cercano a los 40 millones de euros al fondo propiedad del magnate singapurense con la colaboración del súperagente de futbolistas luso.

El problema, según las fuentes consultadas por este periódico no ­es tanto económico... Que también. Es una cuestión de palabra. Y además, lo que más separa actualmente a Enzo del Valencia es el empeño de Vieira y Jorge Jesús, técnico del Benfica, en que el argentino dispute el derbi del próximo día 31 ante el Sporting de Portugal. El Valencia, obviamente, no va a tragar más. Nuno necesita a Enzo para ya y el club no puede esperar hasta el penúltimo día hábil del mercado de fichajes. Benfica se mantiene en su decisión de sacar dinero por el traspaso de Enzo, lo quiere vender este verano sí o sí. A última hora de la noche de ayer, la decisión se mantenía invariable. Sin embargo, para poner las cosas más difíciles todavía, el pasado domingo el centrocampista Amorim -que estaba llamado a cubrir el vacío de la marcha de Enzo junto a Samaris- se lesionó gravemente del ligamento cruzado de la rodilla. No obstante, todavía no es definitivo.

Y encima, la lesión de Amorim

Los técnicos del club lisboeta tienen todavía por delante seis días y 30 millones de euros para firmar otro recambio al internacional argentino. Y además, a Joâo Teixeira, el joven talento de la cantera que reclama toda la gente en Portugal para dar el salto a la primera plantilla después de su extraordinaria actuación en la Emirates Cup. El entorno de Mendes, por su parte, sigue adelante con el plan. La mano derecha del agente portugués se encontraba ayer rematando los últimos flecos del traspaso del madridista Di María al Manchester United y en cuanto acabe con ello, la parada más inminente en su hoja de ruta tiene nombre y apellidos: Enzo Pérez. Pende de un hilo.