Dos caras bien diferentes. Jonas se despidió ayer de compañeros y empleados en Paterna. Su salida, rescindirá su contrato, es inminente, mientras que Joâo Pereira lucha en cada sesión por convencer a Nuno de que tiene un sitio. El portugués nunca ha escondido que su deseo era seguir en el club, sin embargo su situación es complicada tras la llegada de Cancelo y quedarse fuera de las dos convocatorias oficiales. Su puerta de salida no está cerrada, aunque el jugador sabe que si finalmente no se marcha formará parte de la plantilla.

Eran las 11:00 horas. Nuno esperaba en el centro del campo a que llegaran sus jugadores al campo de entrenamiento en Paterna. Alcácer, Barragán, Piatti, Vezo€ ¿Y Jonas? Todos estaban preparados para arrancar la sesión, el técnico los reunía para la charla previa al entrenamiento, mientras el delantero brasileño asomaba por el césped. No entra en los planes del club y de Nuno, desde que se incorporó al trabajo de pretemporada ha trabajado al margen de sus compañeros a la espera de firmar su salida.

No era un día más en Paterna apara él. Tras acabar el calentamiento, se dirigió junto a Viera y Postiga a un campo anexo para completar su trabajo al margen del grupo€ y al acabar se despidió de sus compañeros en el vestuario. Al salir hizo lo mismo con los empleados de la Ciudad Deportiva. Hoy la plantilla tiene día libre y todo apunta que antes del lunes su futuro estará resuelto.

El futuro de Pereira también está en el aire, sin embargo su actitud es muy diferente. El portugués, pese al cabreo por la situación, se vacía en cada sesión y es uno de los jugadores que más ayuda a sus compañeros. Fomenta el buen ambiente y la competitividad para dar el máximo, de hecho es de los impulsores de ´la foto de los campeones´ al acabar un partidillo.

Nuno organizó ayer dos equipos de cuatro jugadores y un portero para hacer dos para dos, pero sumando las victorias en equipo. El lateral estaba junto a Orban, Carles Gil, De Paul y Antonio Sivera, en contra Mustafi, Rober, Cancelo, Zuculini y Yoel. Joâo se exprimía sobre el césped y daba ánimos a sus jugadores, sobre todo muy pendiente del joven guardameta, viviendo con tensión los duelos de sus compañeros de equipo junto al palo de la portería. Competitividad.