El grupo de la Izquierda Unida Plural en el Congreso presentó este jueves una Proposición No de Ley para ilegalizar los grupos violentos en los campos de fútbol e impulsar sanciones tanto económicas como deportivas a los dirigentes de los clubes, entre las que estarían el cierre de estadios o el descenso de categoría. La coalición puso como ejemplo concreto a erradicar a los grupos ultras del Valencia CF. Tal y como cuenta Levante-emv, según señaló en un comunicado el diputado por EUPV-Els Verds, Ricado Sixto, el objetivo es eliminar la violencia de los estadios y sus alrededores, negar a los ultras el estatuto de asociaciones y asignar a la Policía los recursos adecuados para prevenir y perseguir comportamientos violentos en los recintos deportivos. También indica en el comunicado que "mientras los grandes clubes de fútbol están tomando medidas contra la violencia, el Valencia CF sigue admitiendo a los ultras intolerantes".

Según el comunicado, Sixto considera que el club presidido por Lay Hoon "acepta a los ultras que la semana pasada desfilaban hacía el estadio del Levante UD y que hacían apología del terrorismo sobre el asesinato del joven militante en movimientos independentistas, Guillem Agulló". Sixto explicó que «haría falta que el Valencia CF y cualquier equipo de Primera División que tenga grupos ultras instalados en sus gradas piense en las consecuencias desastrosas que esto puede tener». Puso como ejemplo a seguir a los dos grandes: "Si el Real Madrid, el Barcelona y ahora el Atlético se han propuesto controlar a los ultras, ¿por qué no puede hacer lo mismo el Valencia?", se preguntó el diputado de la formación. La Proposición No de Ley incluye también la propuesta de crear en colaboración con los clubes un Registro Estatal de Violentos.

El club adaptará medidas

El Valencia, por su parte, se alineó ayer con la resolución que salió de la reunión entre el Consejo Superior de Deportes, la Liga de Fútbol Profesional y la Federación Española de Fútbol. En el cónclave se decidió que los clubes de fútbol que colaboren con los grupos de aficionados violentos descenderán de categoría, perderán puntos o tendrán que cerrar sus estadios.

Antiviolencia multa a cuatro aficionados por el derbi

La Comisión Antiviolencia resolvió multar a cuatro aficionados por incidentes durante el derbi. Según el escrito del comité, tres de los incidentes se produjeron en el interior del Ciutat de València. En el primero de esos casos se señala a un aficionado que "se dirigió a la zona de los visitantes profiriendo insultos graves [...], lo que provocó diversos altercados y lanzamientos de numerosos objetos". En el otro altercado ocurrido en la grada, el informe alude a un aficionado que «insultó gravemente a los aficionados locales, lo que provocó la alteración del orden". También se señala a un individuo que insultó "gravemente" a los funcionarios en el interior del recinto. El cuarto de los incidentes se produjo "en el exterior del estadio y en la zona frecuentada por la afición contraria", donde un individuo participó "activamente en los enfrentamientos con los aficionados allí presentes lanzando una botella de vidrio". Los implicados recibirán multas de entre 3.000 y 3.500 euros, además de la prohibición de entrar en un recinto entre seis meses y un año.