Nada más entrar en el vestuario del Vicente Calderón, Iturra buscó rápidamente a Rober Ibáñez para felicitarle por su destacada comparecencia ante el Atlético de Madrid. «Muy bien, Rober. Tú eres top», le dijo el centrocampista al futbolista cedido por el Valencia. Y es que el chileno, quizá el hombre con mayor ascendencia dentro de la plantilla del Granada, detectó desde un primer momento cualidades diferentes en la figura del extremo de Sant Bult, que llevó de cabeza a los hombres del Cholo Simeone durante los 77 minutos que permaneció sobre el césped. Ni la neumonía que pasó antes de Navidad ni la falta de ritmo de competición mermaron su gran potencial en su estreno con el conjunto nazarí.

Horas después de su llegada, entró en la lista de convocados, fue titular y desplegó un torrente de fútbol contra el vigente campeón de la Liga.

Verticalidad, regate, desborde... Tan fuerte fue su irrupción que tras los noventa minutos ante el Atleti pasó de ser un auténtico desconocido a convertirse en una de las mayores ilusiones a las que se aferra hoy en día la afición del conjunto que dirige Abel Resino para lograr la salvación. Al llegar a Granada, un equipo claramente marcado por las urgencias, había un sector de la hinchada que no entendía su incorporación, tratándose de un jugador joven con solo 45 minutos en Primera. Antes de que se cumpliera el cuarto de hora de partido, Rober había fulminado todas las posibles reticencias. Partió desde la derecha y al minuto 8 ya le había sacado una amarilla a Godín. Generó espacios y rompió líneas de presión a toda velocidad, incluso estuvo cerca de marcar pero sus dos remates a portería no acabaron en la red de Moyà. En Granada están como locos con él y sus números no engañan: en su estreno, Rober fue el jugador que más faltas provocó de la jornada.

Con la mente en Riazor

Ha estado viendo las diferentes zonas de la ciudad para elegir vivienda y a diferencia de otros jugadores como el recién llegado Lass, que se han instalado en una zona a las afueras, se ha decantado por una área con movimiento, acostumbrado a la actividad frenética que se despliega en el centro de Valencia. Ha realizado un stage en Marbella para afrontar a tope el segundo tramo de la temporada y el domingo le espera una nueva cita ante el Dépor para apretar los dientes.