"Nuno o nosotros", fue el último mensaje que tanto Salvo como Rufete y su equipo hicieron llegar a los responsables de Meriton. Una carta que Amadeo envió a la presidenta del Consejo de Administración del Valencia, Lay Hoon, en la que le pedía que se cumplieran los roles dentro de la estructura del club y que se les informara de cuáles eran las nuevas estructuras y funciones, que en caso de no obtener respuesta en 24 horas, optarían por abandonar el club, él, Rufete y Ayala. Y con ellos los técnicos que llegaron a la Academia de la mano de Rufete hace dos años.

No es necesario ocultar que cuando Salvo lanza este órdago a Peter Lim sabe perfectamente que tiene la partida perdida, pero es consciente de que la situación no tiene retorno porque la convivencia con Nuno Espirito Santo es imposible. Si a ello se añade que solo faltan unos días para que empiece la temporada y el contratiempo que supondría para cualquier club cambiar de entrenador, la elección de Peter Lim estaba cantada. Y más para el propio Salvo, a quien el magnate de Singapur le dijo en su momento que si no estaba Nuno Espirito Santo en el proyecto, no compraba el Valencia. Era por tanto un pulso del que se sabían perdedores, ambos conocían perfectamente lo que en estos momentos significa Nuno para Peter Lim, pero la decisión estaba tomada; continuar en el Valencia sin voz ni voto en las decisiones, al servicio del entrenador y su agente, o forzar una salida en la que todavía anoche trabajaban los servicios jurídicos del Valencia, pero que no tiene marcha atrás. La decisión de Lim ha sido clara; prescinde de Salvo.

En la mañana de este miércoles se han reunido Amadeo Salvo y Lay Hoon para continuar la reunión que tuvo un punto y seguido en la noche del martes en las oficinas del Valencia y que puede suponer la salida definitiva de Amadeo Salvo y Rufete de manera definitiva, así como las formas adoptadas por cada una de las partes implicadas. Por la tarde se incorporaron a la reunión 'Rufo', Kim Koh y Ayala.

A falta de la confirmación oficial de la noticia que destapaba este martes SUPERDEPORTESUPERDEPORTE poco después de la una del medio día a través de su página web, no se puede hablar de un despido ni tampoco de dimisión, más bien de una solución pactada con el propietario dadas las circunstancias que se dan en el club desde hace ya algunas semanas, que hacen inviable la convivencia de Salvo y Rufete con Nuno Espírito Santo. Su despedida no es una buena noticia para el inversor, que se queda sin la persona que le ha hecho de enlace durante meses con la masa social del Valencia CF. De hecho, tanto Peter Lim como sus ejecutivos en el club, Lay Hoon y Kim Koh, han tratado de evitar este desenlace, una misión complicada a partir del momento en que el propietario había decidido otorgar toda su confianza en la figura del entrenador. Lo hizo ya antes de ser dueño de las acciones de pleno derecho al imponer a su entrenador, y lo termina de ejecutar ahora, siete meses después de asumir el control absoluto del club.