Nicolás Otamendi se presentará el próximo sábado en Mestalla como uno más. A día de hoy no se ha presentado ninguna oferta por él en los dos meses y medio que han pasado desde que su agente expresó el deseo del futbolista de marcharse, por tanto nadie duda ya de que el central jugará con el Valencia frente a la Roma y también los dos partidos de la previa Champions, a expensas de lo que pueda ocurrir en los días que quedarán hasta el cierre del mercado el 31 de agosto. Y eso es precísamente lo que a estas alturas empieza a preguntarse ya el argentino, dónde están las ofertas que su representante Eugenio López le aseguró que tenía muy avanzadas cuando diseñó la estrategia para forzar su salida del club.
¿Utilizado? ¿Mal aconsejado? Lo cierto es que en su día, cuando llegó a Argentina 24 horas después de jugar el último partido en Almería, Otamendi consintió que su agente forzara la máquina para obligar al Valencia CF a negociar y rebajar su precio de salida, conscientes de que, como expuso públicamente el propio Eugenio López, «está fuera de mercado». Una situación que, siendo uno de los líderes y referentes del equipo, le deja en una posición incómoda de cara a la afición valencianista ante la que ahora es él quien tiene que dar la cara, no su representante.
Segundo plato
Hace tiempo que Otamendi no lo ve nada claro. Hasta hace dos semanas tuvo noticias sobre contactos entre su agente y Jorge Mendes con diferentes clubes interesados, conversaciones que la hora de la verdad nunca se concretan en nada. Desde el día que se incorporó al equipo apenas ha habido novedades, el argentino ha visto como su agente va de Emirato en Emirato haciendo negocios con otros futbolistas „lo último Di María al PSG por 63 millones„ mientras lo suyo ha pasado a un segundo plano en las prioridades de Eugenio López. La clave, sin embargo, la tienen Peter Lim y Jorge Mendes. La palabra de Lim a Salvo, «Otamendi son cincuenta millones o nada», se mantiene, y eso es algo con lo que no contaba López. Para él todo empezó a torcerse cuando el súper agente portugués le dijo claramente que él no se iba a jugar su amistad con el magnate de Singapur tratando de convencerlo de que cambie de opinión y acabe aceptando alguna oferta por el central muy por debajo de la cláusula.
Una encuesta de SUPER revela que son muchos los aficionados que están dispuestos a olvidarlo todo si el futbolista se queda, aunque una parte importante le pide una explicación pública. Más allá de lo que ocurrió antes, desde el mismo día en que llegó a Valencia y se incorporó al equipo su actitud ha sido absolutamente profesional y así lo va a ser en el terreno de juego. Ha querido y quiere mejorar pero en ningún momento se planteó declararse en rebeldía ni tenía intención de venir a Valencia a montar un circo a pesar de que eso es lo que su agente „otra vez López„se ocupó de filtrar días antes de su regreso. Más presión. Nada que ver con los hechos porque Otamendi, sin embargo, habló con Nuno nada más presentarse en Paterna y le dijo que podía contar con él para todo desde el primer día.
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-- Vicente Bau
