Le llaman la Roca -Le Roc, en francés- y no es por casualidad. Aymen Abdennour -el central que acaba de fichar el Valencia para las próximas cinco temporadas- vio el partido del domingo contra el Deportivo junto a Peter Lim y Lay Hoon en Mestalla, reúne un físico de culturista y la determinación de una especie de Rambo sobre el campo. Es difícil diseñar un recambio mejor para Nicolás Otamendi. Los dos son de esa estirpe de futbolistas dispuestos a partirse la cara por su equipo en cada jugada. Por ello, tampoco es casualidad que en Barcelona lo comparasen con Carles Puyol en los días en los que con más fuerza sonó para reforzar la defensa de Luis Enrique.

Aymen Abdennour tiene puntos en común con centrales como Otamendi o Puyol. Es un zaguero capacitado para liderar la defensa. La pasada temporada se convirtió en el líder total de uno de los equipos que mejor defendió, el Mónaco. La solidez en la parte de atrás fue el factor principal por el que el conjunto entrenador por Leonardo Jardim alcanzó los cuartos de final de la Champions, ronda en la que también complicó la vida de la Juventus. El tunecino destacó por encima de todos sus compañeros en la competición más importante de Europa, razón principal por la que el caché deportivo y económico se ha elevado hasta el punto de que el Valencia ha apostado por él con una cantidad que puede ascender a los 30 millones de euros si cumple una serie de objetivos individuales y colectivos.

El hombre con el que Nuno Espírito Santo cierra la defensa se trata de un central físico y muy completo. Ese tipo de defensas que se cruza a cada balón con ´el puñal entre los dientes´. Es brutal en las coberturas, fortísimo en el cuerpo a cuerpo por arriba y por abajo y un dominador del juego aéreo en ataque y en defensa. En esta faceta Abdennour puede aportar goles en las acciones a balón parado. Es un central que en la Ligue1 ha demostrado que es de los que no se arruga, tiene motivos para ser valiente y confiar plenamente en sus cualidades físicas, técnicas y de personalidad. Su aspecto puede engañar, es un fantástico marcador en el uno contra uno y cuando tiene que salir a campo abierto a ganar los duelos por intensidad, rapidez, agilidad y contundencia.

El aspecto tosco de Abdennour también puede llevar a engaño. Rudo sin balón, pero fino con la pelota. Es un central zurdo que no se arruga a la hora de sacar el balón y lo hace con una notoria visión de juego que le permite desplazar en corto y en largo. La capacidad mental influye mucho en su rendimiento. Este tunecino de 26 años llega al Valencia en plena madurez y en el mejor momento de su carrera.

Prácticamente todo lo que intenta le sale bien. Es un central sólido, que confía muchísimo en su velocidad y en su atlético cuerpo, lo que le sirve para disimular los momentos en los que le ganan la espalda o tiene una falta de atención. El terreno táctico, la colocación, no es su punto fuerte. Pero lo suple gracias a sus facultades. A la hora de salir al cruce o recuperar la posición es un espectáculo. Su corpulencia provoca que no destaque por su reacción inicial, aunque la suple con potencia. En ocasiones se confía en exceso y entre los aspectos a mejorar en su ascenso al fútbol español se encuentra el control, a veces va demasiado al límite.

El defensa tunecino conoció Mestalla y a su afición durante el partido contra el Depor. Aymen quedó gratamente impresionado. Este lunes a las 12h. volverá al estadio para ser presentado como nuevo jugador del Valencia para las próximas cinco temporadas. Media hora antes valorará en la sala de prensa su fichaje por «un gran club de España y Europa».

En la jornada del domingo el futbolista visitó uno de los puntos de mayor interés de la ciudad, la Ciudad de las Artes y las Ciencias, en compañía de la presidenta del consejo de administración del club, Lay Hoon.

En un marco incomparable, Abdennour mostró el número 23 en su camiseta, el que llevará esta temporada y confesó su felicidad por haber fichado por el Valencia. «Pienso que podemos hacer una gran temporada, vi el partido entre el Valencia y el Mónaco apuntó el tunecino. Además, al defensa le ha encantado lo que ya ha podido ver de Valencia y promete ofrecer lo mejor de sí: «Estoy preparado para este reto, feliz con el entrenador, la presidenta y mis nuevos compañeros».

El Valencia contrata experiencia Champions. Aymen es ahora el segundo jugador de la plantilla, junto a Rodrigo Moreno, que sabe lo que es alcanzar los cuartos de final de la Liga de Campeones. Ayer disfrutó de Mestalla, donde aspira a seguir creciendo también en la Champions con la camiseta blanquinegra. El ex central del Mónaco vio el partido en el palco de autoridades del estadio.