Cuando vi a mi madre llorar en aquella consulta del médico supe que algo no iba bien. Yo tenía solamente 10 añitos cuando me detectaron Ataxia de Friedrich, una enfermedad degenerativa muscular. Lo que pasaba por mi cabeza en aquellos tiempos era jugar a fútbol y ver los partidos de mi Valencia CF. Llegué incluso a jugar en el cadete del equipo de mi pueblo (Náquera). Todo iba más o menos bien hasta que cumplí los 17 y tuve que dejar de correr, saltar y lo que más me dolió, jugar a fútbol.

Nunca olvidaré el doblete de 2004, como con once años lo celebré al lado de mi madre en la Plaza del Ayuntamiento. Aún conservo la bandera de los campeones, con la que me subí loco de alegría en una de las farolas. Pasó el tiempo y, por suerte, todavía pude caminar con ´normalidad´ hasta los 20 años. A pesar de no poder practicar mi deporte favorito, seguía los movimientos, fichajes y partidos en ´Superdeporte´. Recuerdo esos veranos de levantarme con el calor valenciano de agosto y lo primero, pegarme al ordenador a ver el SUPER y comprobar si se había hecho oficial algún fichaje.

Ahora los obstáculos se han multiplicado en mi camino. A los 18 años dejé de percibir una ayuda mensual de la Generalitat que no pasaba de 40 euros y por la que mi madre había luchado removiendo el cielo y la tierra. Pasados los 20, me di cuenta que la enfermedad estaba avanzando a más velocidad de lo normal, cada vez me costaba más el simple hecho de caminar o bajar unas escaleras. Hoy, con 22 años, he sentido como la Ataxia me sobrepasaba irremediablemente. Caminar sin apoyo es una utopía para mí y mi día a día se torna cada vez más duro y difícil.

Para más inri, mis padres y yo nos encontramos viviendo en el extranjero (Suiza), puesto que nos desahuciaron y tuvimos que emigrar en busca de un trabajo para ellos y un futuro para mí. Por la falta de apoyo económico, el avance de la enfermedad y la desesperación me he visto obligado a montar un Crowdfunding para poder recaudar el dinero de un tratamiento que en Bolivia está frenando hasta un 90% el avance de la enfermedad en casos como el mío. Un tratamiento a base de Células Madre, Vitaminas, fisioterapia y rehabilitación cuyo precio total ronda los 13.000 euros. También he subido un vídeo en ´YouTube´ „Ayuda, por favor. #IlusiónParaÁlex„, explicando al detalle cómo me siento actualmente y cómo colaborar con donaciones a través de la web https://www.leetchi.com/c/solidaridad-de-alex o en ´PayPal´ en la siguiente cuenta: teketank@hotmail.com.

Actualmente lucho por muchas cosas, pero tengo unas pocas ilusiones, conseguir el tratamiento mencionado y que llegue cada domingo para ver jugar al equipo de mi corazón, para disfrutar del fútbol de André Gomes o los goles de Paquito Alcácer€ porque si algo tenemos los valencianistas es que jamás nos rendimos. Un abrazo a todos y Amunt Sempre!