El futuro de Gary Neville en el Valencia está más en el aire que nunca. La continuidad del técnico inglés peligra después la enésima decepción de su equipo. La derrota contra el Real Betis ha provocado que por primera vez en la temporada Peter Lim esté valorando seriamente la posibilidad de destituir al entrenador del primer equipo. El club asegura oficialmente que no busca sustituto para el técnico, pero lo cierto es que el Director Deportivo Suso García Pitarch ya tiene encima de la mesa otras alternativas. La más firme es la de Juande Ramos. El técnico de Pedro Muñoz está en la agenda blanquinegra para tomar el relevo de Gary como entrenador del Valencia. La dirección deportiva también contempla otras opciones como Joaquín Caparrós, pero Juande ahora mismo es el mejor colocado. Gusta su perfil de entrenador experimentado y conocedor de la liga española y no hay que olvidar que su agente, Ginés Carvajal, estuvo la semana pasada en Valencia cerrando el acuerdo de cesión de Denis Cheryshev. El Benito Villamarín ha dejado muy tocado a Gary y la única persona que puede salvarse ahora es Peter Lim.

El dueño del Valencia mantiene un vínculo de amistad con Neville desde hace años y para él sería un trago muy amargo tener que destituirlo como entrenador. Hasta ahora no se lo había planteado. Sin embargo, Peter Lim comienza a darse cuenta por primera vez en la ´era Gary´ que su socio no es la solución que necesita el equipo para salir de la crisis deportiva en la que está instalado desde hace semanas. El descenso amenaza cada vez más seriamente y urge tomar decisiones y sobre todo acertar. No hay margen para equivocarse. Suso tiene encima de la mesa un abanico de posibilidades entre la que destaca por encima de todas la de Juande, pero la decisión tendrá que tomarla única y exclusivamente Lim. El futuro de Gary se juega en Singapur.

Suso tiene un hándicap a la hora de encontrar un recambio a Neville. Es difícil encontrar a un entrenador que se ajuste al perfil que solo acepte firmar hasta el 30 de junio. El club está en ello, aunque oficialmente diga lo contrario. Es más, el club también tantea el mercado en busca de entrenadores para el año que viene y Paco Jémez, como publicó Superdeporte, está encima de la mesa. Pero el problema del Valencia ahora mismo pasa por el presente. Lim tiene que decidir desde Singapur. Porque lo que está claro es que Neville no está dispuesto a dimitir. Este domingo lo dejó claro en la rueda de prensa. No contestó a la pregunta de si opinaría como comentarista que es necesario destituir al entrenador. También se mostró esquivo en la siguiente. ¿Ha llegado a la conclusión de que es mejor hacerse a un lado? "Entiendo la pregunta, pero confío en mi trabajo y mis conversaciones con Lim son privadas". A la pregunta de si "¿Es momento de que el club haga una declaración para decir que se sigue confiando en usted?", Gary contestó: "Las declaraciones son débiles y se las llevan el viento, cada derrota es una bofetada, hablo con Lim y mi relación está muy tranquila". Todo es tranquilidad para Gary. Todo lo contrario que para la afición. Medio centenar de aficionados recibieron al autobús del equipo en la ciudad deportiva a grito de "¡Gary, vete ya!". Minutos antes, un aficionado se encaró con el técnico. "Puedes ser un buen entrenador, pero tu sitio no está aquí". Los jugadores fueron increpados en Paterna y Manises y solo se salvaron de la ´quema´ Jaume, Cheryshev y Mustafi. Suso y Gary se estrecharon la mano en el aeropuerto en una despedida escueta. Hoy pueden volver a encontrarse cara a cara. Singapur tiene la última palabra.