La tensión se apoderó de algunos jugadores durante el partido contra Las Palmas. Durante el transcurso de la segunda parte se produjo un episodio que así lo evidencia. Mustafi le hizo un gesto a Alcácer, golpeando la palma de su propia mano, recriminándole delante de todos una acción y pidiéndole más intensidad. El delantero de Torrent se sintió señalado, no se lo tomó nada bien e hizo ademán de ir hacia él. Estaba molesto con el alemán, que ya ha protagonizado algunos episodios de este tipo a lo largo de la temporada. Paco frenó en seco y desde la distancia que los separa en el terreno de juego ambos comenzaron a intercambiar reproches, una situación que se alargó al menos durante medio minuto. Comenzó la siguiente jugada y los dos futbolistas del Valencia, el capitán del equipo y el referente de la línea defensiva, seguían enganchados. La derrota ha dejado sensaciones muy negativas entre los futbolistas del conjunto que dirige Ayestaran.