Pako Ayestaran va a hacer todo lo que esté en sus manos para que el Valencia gane de una vez un partido y espante definitivamente los fantasmas del descenso a Segunda División. El técnico busca una reacción en sus jugadores y no ha dudado en tocar todos los palos esta semana. A nivel mental, físico y táctico. Por eso ha activado un plan físico de emergencia con dobles sesiones, ha recuperado los entrenamientos tácticos por líneas y hasta este miércoles cambiará el escenario de trabajo en busca de estímulos. El equipo abandonará por un día la ciudad deportiva de Paterna para trasladarse al Parador de El Saler. Allí hay programado un entrenamiento y una posterior comida de equipo en el restaurante. No es una conjura ni nada por el estilo. Solo es un intento más de Ayestaran por hacer más fuerte al grupo y preparar a sus jugadores para las siete jornadas de Liga que tienen por delante. Hay mucho en juego. Por eso cualquier iniciativa es poca.

Llegada del Valencia CF al Parador de El Saler

Entrenamiento con balón en el Parador

Pako está preocupado por el estado físico y mental del equipo. Para lo primero ha encontrado solución. Al menos lo va a intentar. Ayestaran activó este martes un plan físico de emergencia para recuperar las piernas de sus jugadores de cara al tramo final de Liga. Empezó a hacerlo con una doble sesión. Algo que no es normal a principios del mes de abril. Los futbolistas trabajaron con cuerdas de fuerza y a mucha intensidad desde las diez y media de la mañana. Fue el comienzo de una doble sesión que duró tres horas. Hora y media por la mañana y otra hora y media en la sesión vespertina. Pako sabe que este tipo de planes requieren entre 4 a 6 semanas para que den resultados y es un tiempo que no tiene, pero lo ha puesto en marcha. Al menos le garantiza llegar a los dos últimos partidos a tope del campeonato.

Ayestaran tampoco ha cambiado el escenario de entrenamiento de este miércoles por casualidad. Pako quería escapar al menos un día de Paterna para que sus futbolistas cambiaran de aires y se ´aislaran´ por un día de la tensión que lleva instalada en la ciudad deportiva toda la temporada por culpa de los malos resultados. Cree que ese cambio ´despejara´ al menos por unas horas sus cabezas. Algo que le hace falta al equipo. El propio entrenador lo sabe. Lo comprobó el pasado sábado en Las Palmas. El Valencia completó una buena primera parte siguiendo el manual de emergencia de Pako, pero sus jugadores se cayeron mentalmente al primer contratiempo. El empate de Jonathan Viera supuso un golpe anímico para el equipo del que ya no se recuperaría.

Pako también ha puesto el foco en lo futbolístico. Por eso este martes trabajó con líneas durante el entrenamiento matinal. Ayestaran dispuso dos líneas de cuatro. Una, la que parece titular de cara al partido del domingo, fue la formada por Barragán, Mustafi, Abdennour y Siqueira. La otra la formaban Santos y Vezo en el centro de la zaga con Danilo y el canterano Caballo en los laterales. El técnico también hizo trabajo específico con los mediocentros cuando el resto de jugadores ya se retiraban. Pako trabajó con Javi Fuego, Danilo y Dani Parejo la salida de balón y los movimientos. El técnico cree que aún hay tiempo para encontrar automatismos.

Enzo Pérez y Mina se apuntan

El Valencia, consiga lo que consiga Ayestaran esta semana, será más fuerte el domingo. El entrenador recupera a dos activos que pueden imprimirle energía al equipo. Son Enzo Pérez y Santi Mina. El argentino se incorporó por la tarde. El gallego hizo parte de la sesión. Los dos llegan a tiempo contra el Sevilla.