Santi Mina le tiene tomada la medida al Barcelona. Marcó en Mestalla y anoche volvió a hacerlo en el Camp Nou. El gallego explotó en el partido de la primera vuelta con aquella asistencia de gol de Paco Alcácer. Ayer se consolidó como uno de los jugadores con más proyección de este Valencia. El joven futbolista no para de crecer. El Barça le sienta bien. Este domingo de nuevo fue decisivo contra los de Luis Enrique. Como tantas veces lo fue Claudio el Piojo López. Lo hizo con el tanto que le dio los tres puntos al equipo blanquinegro en el Camp Nou. Una auténtica obra de arte al filo del descanso que será recordada en mucho tiempo. Golazo.

Minuto 44. El Valencia firmó la mejor jugada del partido y posiblemente de la temporada. El equipo, lejos de transiciones rápidas, tocó y tocó en el Camp Nou. Al más puro estilo Barça. Los de Pako Ayestaran encadenaron 18 pases para llegar a Santi Mina. André Gomes, Javi Fuego, Rodrigo, Abdennour y Barragán se asociaron por el costado izquierdo hasta que el balón llegó a Enzo Pérez. El argentino encontró a Parejo al borde del área con un envío perfecto con la izquierda. El de Coslada encontró el espacio perfecto para servir el balón en bandeja a Santi. Mina hizo lo siguiente. Controló, encaró a Bravo y lo batió al palo largo con la pierna derecha. Una auténtico golazo.

Mina redondea una semana espectacular en el capítulo individual. La semana pasada salió ovacionado de Mestalla después de darlo todo. Salió acalambrado. Eso era exactamente lo que pedía la afición. Ayer volvió a ser protagonista con su octavo gol oficial de la temporada. El gallego lleva cuatro tantos en Liga, tres en Europa League y uno en la Copa del Rey. Y eso que la mayoría de partidos los ha jugado en banda. Ayer volvió a ser la apuesta de Pako en el tridente de ataque. Dejando en el banquillo incluso al propio Alcácer. Santi se ha asentado en el once y no tiene techo.