El Valencia se reivindicó como equipo. «Estamos muy contentos y felices por el resultado y por la imagen€ por todo. Para ganar aquí se necesitan muchas cosas, sacrificio, equipo, respeto, humildad». Parejo enumeró algunas de las razones de la victoria y también del momento. Ahora mismo, el Valencia CF es un estado de ánimo muy peligroso para cualquier adversario. Así lo demostró en el Camp Nou, ante un Barça exigido al máximo. Ayestaran ha generado un clima de energía positiva y confianza existencial determinante. Parejo es un ejemplo esplendido. El centrocampista camina hacia su mejor versión, cuando hace sólo dos partidos su estado parecía irreversible. El equipo mejora en torno a él y así se sintió en un escenario de enorme prestigio. Ante el Sevilla, con todo lo que significaba ese partido, Dani marcó la diferencia y en casa del Barça volvió a decir «aquí estoy yo».

Por sus gestos, por su seguridad, por su forma de manejar el balón, por su trabajo en la recuperación€ a los pocos minutos, las sensaciones eran claras: Parejo está enchufado otra vez. «Teníamos nuestro plan, nunca hemos dejado el guión y nos hemos llevado los tres puntos». Dani puso el acentó sobre el planteamiento de Ayestaran e insistió en el despliegue del bloque en una única dirección: «Hemos estado increíbles hemos acabado todos muertos». No es para menos, el Valencia se fue hasta los 118 kilómetros recorridos, el registro máximo del equipo en La Liga en las dos últimas temproadas. Hay una dirección y un objetivo. El Valencia manejó con inteligencia la presión medio-alta en los primeros 45 minutos. «Hemos jugado nuestro partido, hemos hecho las cosas bien y haciendo eso lo más probable era sacar un buen resultado. Todos hemos sumado, también el banquillo», insistió Parejo.

Parejo fue el futbolista que manejó los tiempos para el Valencia, fue el segundo que más balones recuperó tras Enzo (siete) y el tercero „de todo el partido„ que más distancia recorrió, tras André y Javi Fuego. El centrocampista tuvo influencia en todos los apartados y dio la asistencia del 0-2 a Santi Mina justo antes del descanso. No estaba feliz porque las cosas no salían y se notaba: «El jugador tiene que estar contento, feliz y tranquilo, se tiene que generar un conjunto de cosas y así se saca el mayor rendimiento. Cuando todo el mundo rema en el mismo sentido, llegan los buenos resultados». Parejo lleva el timón.