Mestalla es feliz. La afición disfrutó en la grada casi tanto como los jugadores en el césped contra el Eibar. Fue una fiesta para todos. El equipo volvió a meter cuatro goles en Mestalla un año después y, algo casi tan importante para ellos, dejaron la portería a cero. Este Valencia es otro. Por si había alguna duda. La mano de Pako se nota y mucho. Los jugadores tienen la confianza por las nubes y se atreven a hacer cosas que hace un mes parecían ciencia ficción. Ayestaran los ha hecho mejores. No hay duda. Si después del Barça era el firma candidato al banquillo de la próxima temporada, según Suso García Pitarch, ahora lo es un poquito más. Ley de fútbol. Como la de Paco Alcácer. El delantero siempre vuelve. Para poner en pie al valencianismo, recordar a Vicente Del Bosque de lo que es capaz, cortar su sequía y, de paso, tapar bocas. El de Torrent marcó tres goles y llevó la locura al estadio, pero no fue el único. Cancelo se unió a la fiesta del '9' con un recital de talento, verticalidad y velocidad endiablada. Parejo puso el fútbol. Rodrigo está más preciso que nunca. André recupera su mejor versión y la defensa por fin se fue imbatida de un partido medio año después. Portería a cero, goles y fútbol del bueno. ¡Así da gusto! ¿Séptimos? ¿Y por qué no? Este equipo es un cañón. Con 'K' de Pako y ´C´de Paco. ¡Que vivan los Pacos!

Ni siquiera hubo que esperar un minuto para darse cuenta de que los jugadores no habían perdido el hambre con el que saltaron al Camp Nou. Salieron a ganar y André lo dejó claro muy pronto con un disparo que la defensa del Eibar envió a córner. Si alguien pensaba que lo del Sevilla y el Barça era un espejismo estaba equivocado. El equipo volvió a bailar al son de un Parejo. Como siempre desde que llegó Ayestaran. Dio amplitud al campo desde dentro para matar el partido por fuera. El '10' está de diez. Hasta los más críticos con él se rinden a su fútbol. Pako apostó por un bloque casi idéntico al de Barcelona y acertó. Devolvió a Paco al once en busca de sus goles por el fatigado Enzo y dio la titularidad a Cancelo por el sancionado Barragán. Los dos fueron protagonistas en los tres primeros goles. Refrescaron al equipo y encima dieron un salto de calidad en ataque y en la banda derecha. Desde allí llegó el mayor peligro de la primera mitad. Paco no sólo es gol. Lo demostró a los diez minutos dejando el balón en bandeja a Parejo. Se quedó delante del portero y fue trabajado por Dani García. Penalti claro. Ya no es penalti, pero ejerció como tal cediéndole el lanzamiento a Paco. El 9 no lo desaprovechó. Riesgo detuvo en primera instancia, pero no puedo hacer nada con el rechace. Solo era el principio del festival de Alcácer. El segundo llegó desde el toque. La fórmula del otro Pako. Mustafi abrió a la banda, Rodrigo conectó con Cancelo y el portugués se metió hasta la cocina hasta encontrar a Alcácer. Definición arriba y al primer toque. Paco en estado puro. Pero faltaba lo mejor. El tercero de nuevo llegó desde la derecha. Con un tuya-mía de Joao y Rodrigo y centro perfecto del hispano brasileño a la cabeza...de él. Del 9. Del que siempre tiene el don de estar en su sitio.

Paco se marchaba al descanso con un hat-trick, la ovación y el cántico de la grada. ¡Qué bien suena el Paquito Alcácer, lo, lo, lo, lo, lo, lo!". Es la sintonía del gol en Mestalla. Y de la asistencia. En eso también es especialista. Así comenzó la segunda mitad. Sirviéndole un balón de espaldas a André que el portugués estrelló en el larguero. Llegaba el cuarto. ¿Por dónde? Tocando por dentro y matando por la derecha. Como no podía ser de otra forma. Abrió Fuego con calidad, tocó Rodrigo con precisión y se metió hasta dentro Cancelo con una velocidad endiablada y un toque sutil por encima de Riesgo. Golazo. Fútbol en estado puro. Como hacía tiempo que no se veía en Mestalla. El estadio era feliz. Tanto que acabó haciendo la ola. La afición se merece eso y más. Ellos disfrutaba y los jugadores también. Se gustaban en el campo. Hasta Diego Alves y los centrales Mustafi y Abdennour se apuntaron a la fiesta atajando cualquier amago de peligro del Eibar. Mestalla los despidió a todos con una calurosa ovación. Después de mucho tiempo, se identifica con ellos. Y no hay nada más bonito en el fútbol que eso. ¡Que no acabe la Liga tan pronto! ¡Ahora no!

- Ficha técnica:

4 - Valencia: Diego Alves, Joao Cancelo, Mustafi, Abdennour, Siqueira (Gayà, m.17), Javi Fuego, Parejo, André Gomes (Enzo Pérez, m.61), Rodrigo, Paco Alcácer (Negredo, m.69) y Santi Mina.

0 - Eibar: Riesgo, Capa, Ansotegui, Ramis (Dos Santos, m.82), Juncà (Lillo, m.46), Dani García, Escalante, Keko, Adrián, Inui y Borja Bastón (Sergio Enrich, m.63).

Goles: 1-0, m.10: Paco Alcácer. 2-0. m.28: Paco Alcácer. 3-0, m.40: Paco Alcácer. 4-0, m.56: Cancelo.

Árbitro: Estrada Fernández (comité catalán). Amonestó por el Valencia a Abdennour y vieron la cartulina por el Eibar Dani García y Ansotegui.

Incidencias: partido disputado en Mestalla ante 35.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria del exportero del Valencia Quique Martín, que jugó en el club entre 1951 y 1956.