Pako Ayestaran ha confirmado este viernes a Levante TV que quiere desprenderse de Álvaro Negredo y Enzo Pérez. Ambos jugadores son dos pesos pesados del vestuario, pero el gran desembolso realizado por cada uno de ellos, unido a su bajo rendimiento y a la etiqueta de 'liderazgo tóxico', son motivos suficientes para que el técnico vasco no quiera contar con ellos de cara a la temporada 16/17 y quiere soltar cuanto antes dichas patatas calientes.

Al margen de las opciones de mercado que manejan Milan e Inter, lo cierto es que los agentes de Negredo, el grupo Doyen, tienen mucha entrada en los dos clubes de la capital de Lombardía, y en el club de Mestalla hay moderado optimismo en que la operación se pueda llevar a cabo. Para que así sea, se da por hecho que el jugador tendrá que poner de su parte. Las cifras son claras, el Valencia espera recaudar entre siete y diez millones, el Milan parece dispuesto a pagar una cantidad similar, pero a cambio el jugador tiene que renunciar a parte de la ficha que está cobrando en el Valencia, que por otra parte es el más alto del primer equipo, cerca de los tres millones de euros netos por temporada.

Si finalmente traspasa a Álvaro Negredo, el Valencia CF tendrá más margen de maniobra para confeccionar la plantilla, ya que además de recaudar dinero por él, se libera de un sueldo y sobre todo, de las amortización. Obviamente, el club es plenamente consciente de que no puede recuperar ni muchísimo menos los casi 30 millones de euros que le costó, pero como dice el refrán valenciano, més val perdre, que més perdre, es decir, asume que pierde dinero y trata de perder la menor cantidad posible. En lo meramente económico, Negredo y Enzo Pérez son las patatas calientes que tenía que afrontar Peter Lim y por ello García Pitarch se ha puesto manos a la obra.

Por otra parte, hay factores que escapan a lo deportivo y lo económico, y es el convencimiento del cuerpo técnico de que la salida de Negredo y Enzo Pérez es necesaria para el buen funcionamiento del grupo y del vestuario, ya que se les considera dos 'liderazgos tóxicos'. A ambos, el club les ha comunicado que no cuentan para la temporada que viene.