El sorteo de la fase de grupos de la Liga de Campeones convierte a Mónaco en el centro del planeta fútbol. El Valencia CF no estaba en el bombo, pero Peter Lim tenía previsto acudir. Así lo marca su agenda. La presencia asegurada de los grandes clubes del fútbol europeo convierte al Principado en un escenario ideal para establecer contactos y cuajar operaciones. Allí estará también Jorge Mendes. Los objetivos están marcados. El futuro de Paco Alcácer se resolverá en cuestión de horas. Su recambio debe ser Munir El Haddadi, incluido dentro del desembarco del delantero de Torrent. Sin embargo, se cae Samper. Para la defensa, el central que más gusta es Ezequiel Garay, aunque su incorporación no es sencilla. Las pretensiones económicas del Zenit son altas y el argentino tiene contrato hasta 2019. En cualquier caso, Sidnei y Schär están en la recámara para reforzar el eje de una retaguardia que demanda la continuidad de Mustafi y un hombre más, como mínimo.

Munir maneja varias propuestas, pero su destino será el Valencia. Los responsables blanquinegros activarán hoy la negociación por el punta criado en Galapagar (Madrid), aunque de origen marroquí. Los términos de la operación Alcácer están perfilados. El Valencia ingresará 30 millones de euros fijos más dos en variables y la propiedad de El Haddadi, el Barça mantendrá una opción sobre el atacante, que puede ser a través de una recompra o un derecho de tanteo, es decir, la posibilidad de igualar cualquier oferta que se reciba en caso de perfilarse una futura venta.

Competir de igual a igual

El Celta estaba muy interesado en Munir, pero el asalto definitivo del Valencia no va a dar más opción. Es fútbol, pero tras los contactos, la negociación definitiva debe terminar con el delantero del Barça vestido de blanquinegro. Así, Pako Ayestaran tendrá al punta con velocidad, movilidad y capaz de generar juego más allá del remate. Su perfil no tiene nada que ver con Alcácer.

Munir llegará tras participar en 45 partidos oficiales con el Barça, en los que ha dejado 10 goles más 10 asistencias, el último, un golazo —clave— en la Supercopa de España ante el Sevilla. Sin opción ante el tridente formado por Neymar, Luis Suárez y Messi, en el Valencia tendrá la opción de competir en igualdad. En categorías inferiores generó tantas expectativas que Vicente Del Bosque le hizo debutar con la absoluta para impedir que fuese reclutado por Marruecos, el país de su padre.

Una opción complicada

Ezequiel Garay es el central de jerarquía que el Valencia pretende para apuntalar la defensa junto a Mustafi. En el argentino se confía por calidad, trayectoria y madurez (en octubre cumplirá 30 años). La mezcla con Mustafi debe resolver las dudas y los problemas de la línea defensiva. Todo encaja, menos la voluntad del Zenit de San Petesburgo, que no quiere desprenderse de su defensa más importante. Las cantidades del traspaso pueden frustrar el intento.

Albiol sigue «intransferible»

Sidnei y Schär son otros de los hombres que García Pitarch guarda para apuntalar el fondo. Uno de los favoritos era Raúl Albiol, pero el Nápoles sigue sin ceder. Los italianos no quieren perder a Koulibaly (cerca del Chelsea) y Albiol de una tacada. ‘La Gazzetta’ asegura que el Nápoles ha dicho «no» a 12 millones, para el jugador iban 2,5 millones en cada uno de sus tres años.