Suena fuerte, pero Mario Suárez no recuerda un partido peor a nivel personal como el que hizo el pasado domingo en Mestalla frente al Betis. Y eso que, a sus 29 años, el centrocampista del Valencia ya acumula una dilatada carrera deportivo con su paso por el Mallorca, el Atlético de Madrid o la Fiorentina o Watford entre otros. El mediocentro defensivo es el primer crítico con su actuación en el partido contra el Real Betis y eso es una buena señal. El madrileño tuvo muy malas sensaciones dentro del campo desde que saltó al terreno de juego hasta que tuvo ser retirado por Pako Ayestaran en el descanso. Estuvo fallón, lento y poco preciso en la entrega. Perdió seis balones en cuarenta y cinco minutos que en su posición son casi prohibitivos. Él lo sabe, salió frustado del estadio y fue el primero en entender el cambio, pero también sabe que no es lo normal y que no puede volver a pasar. Mario se exige mucho más.

El futbolista ha analizado su partido en imágenes como el resto de la plantilla. Aunque no le hubiera hecho falta porque ya en el mismo campo se dio cuenta de que no era su día. Por mucho que intentaba engancharse al partido no era capaz. Por suerte, Mario ha entrenado bien esta semana, tiene el apoyo de Pako Ayestaran y sus compañeros y está convencido de que las sensaciones del domingo solo fueron un accidente. Tanto el técnico como el jugador asumen que el gran error del equipo en la primera parte fueron las pérdidas de balón que cortocircuitaron la circulación del mismo. Mario está llamado a ser el jugador que sujete al equipo desde su posición de eje del trivote ayudado tanto a la pareja de centrales como a sus dos volantes ofensivos. Tiene un rol de mucha responsabilidad en el equipo y no está dispuesto a volver a fallar.

Con esa mentalidad ha entrenado toda la semana en la ciudad deportiva de Paterna. El futbolista ha acumulado minutos de trabajo con su dos nuevos centrales -con los que solo había trabajado una semana- y con sus socios del centro del campo Dani Parejo, Álvaro Medrán, Carlos Soler y el sancionado para Bilbao Enzo Pérez y llegar mejor preparado al partido del domingo contra el Athletic. Porque será titular. Ayestaran, al igual que Suso, tiene muchas esperanzas depositadas en el rendimiento que pueda ofrecer el jugador. El cuerpo técnico tiene claro que muchas de las opciones del equipo esta temporada pasan por la conexión que exista entre los dos centrales Ezequiel Garay y Eliaquim Mangala y los centrocampistas ofensivos Parejo y Enzo. Los cinco elementos de Pako, como bautizó Superdeporte.

Mario Suárez no recuerda un partido peor como profesional como el del domingo contra el Betis. Curiosamente, una de sus mejores actuaciones de su carrera la cuajó contra el rival del domingo, el Athletic de Bilbao, entonces dirigido por Marcelo Bielsa. Un buen estímulo para el ahora valencianista. Fue un 9 de mayo en la final de la Europa League de 2012 que el Atlético de Madrid disputó contra el conjunto vasco en Bucarest. Allí, de la mano de Simeone, se exhibió formando pareja en el centro del campo con Gabi y las ayudas de Diego -sustituido por un jovencísimo Koke en el minuto 88- y Arda Turan desde los costados. El segundo gol de Falcao, de hecho, tuvo como origen un robo de balón de Mario a Amorebieta. Mario quiere volver a mandar. Como aquel día. La Catedral le espera.