El Valencia 2015/16 tenía a Paco Alcácer y Álvaro Negredo como especialistas, más Rodrigo y Santi Mina como alternativas para la delantera. La apuesta para la presente temporada es diferente; no por calidad, pero sí por la variedad de recursos. No hay un nueve clásico, dominador del juego directo, y tampoco un depredador expedito. Santi Mina, Rodrigo, Rafa Mir y Nani (delantero centro durante muchos minutos ante el Betis) representan a otra escuela de atacantes: buscan el espacio, mejoran a la carrera, tienen capacidad para llegar y asociarse de cara, desbordan con facilidad por fuera y no les interesa demasiado ´pegarse´ a los centrales. Aunque todos tienen género propio, Munir es de la misma familia. La competencia está abierta, pero El Haddadi (21 años) es la apuesta fuerte. El exblaugrana dejó buenas sensaciones en su estreno, entró desde el banquillo y, en media hora, estrelló un balón en el larguero, participó decisivamente en el empate (pasajero) y exigió el máximo de Adán, con un disparo desde la frontal. La presentación del ´nuevo nueve´ fue una de las pocas noticias positivas que dejó el tercer intento frustrado de victoria.

Munir es luz al final del tunel.

Obviamente, no tiene la trayectoria de Negredo y tampoco puede compararse con Paco Alcácer, si bien, tiene cualidades para cuajar en Mestalla. Una vez fuera del ecosistema del Barça, su responsabilidad (también la presión) es mayor. El reto „defender la camiseta del Valencia„ es potente y ha empequeñecido a buen número de futbolistas. En lo que a estilo de juego se refiere, no parece que el cambio vaya a suponer un trauma. El Haddadi se ha cogido rápido. La presencia de Mina, Gayà (compañeros en la Sub21) o Montoya seguro que facilitan la adaptación al vestuario.

Variedad de recursos

En las dos últimas jornadas, Santi Mina, Rodrigo y Nani han intercambiado posiciones en el ataque. Munir proyecta continuidad. Por condiciones, puede trabajar desde el eje. En esa dirección, la referencia en el primer equipo del Barça es clara: casi siempre jugó partiendo desde la banda, izquierda o derecha, como sucedió ante el Betis.

Ayestaran dio entrada a Munir por Santi Mina en el minuto 63. El contexto no era fácil. El equipo ya estaba con diez por la expulsión de Enzo y 0-2 en el marcador. Cinco minutos después, el hispano-marroquí dejó una de sus jugadas marca de la casa: zurdo, arrancó desde la derecha y desde la frontal soltó un disparo bien colocado buscando la escuadra contraria; con más colocación que potencia, topó con el larguero. Claro para asistir al compañero, profundo en sus movimientos, astuto buscando y fino en la definición mano a mano, el disparo de media distancia también es otra de sus virtudes.

Nani empezó en punta; Rodrigo y Mina se encargaron de las bandas. Con la entrada de Munir, en la segunda parte, Nani siguió en el centro y Rodrigo trabajó por la izquierda. Una pared en la frontal entre Parejo y el luso terminó en un pase genial de Dani para Rodrigo, que liquidó a Adán en el mano a mano. Pako apostó por pegar a Nani a los centrales y hacer daño a la espalda de la zaga bética con los movimientos de ruptura de Munir y Rodrigo. Medrán y Parejo tomaron el centro del campo. En plena fase de desajustes, un cabezazo de Munir, tras un buen saque de esquina de Parejo, ajustado al máximo al palo largo de Adán (cambió totalmemte la trayectoria) permitió a Garay hacer el empate?después de la parada del meta bético. Munir sumó, pero no fue suficiente.