El ´caso Fran Villalba´ vuelve a la primera línea. Con su renovación estancada desde hace meses por la falta de entendimiento en la negociación entre José Ramón AlexankoJosé Ramón Alexanko y sus representantes y su escaso protagonismo en el Mestalla, en los últimos días ha aparecido con fuerza el Manchester United. Según ha podido saber SUPER, el club británico va muy en serio a por el canterano valencianista, al punto que ha estado enviando a un ojeador con asiduidad a los partidos del filial con el objetivo de recabar la información necesaria sobre el prometedor centrocampista del Cabanyal. Todos los informes recopilados por este emisario son positivos y aconsejan su fichaje a los ejecutivos del Old Trafford, que ya han preguntado cuál sería su precio de salida. En este sentido, el Valencia no negocia, la cláusula está cifrada en cuatro millones de euros, unos 3,2 de libras y, según informa el Daily Star, en Manchester estarían decididos a abonar esa cantidad.

Por parte del joven futbolista sigue existiendo la misma predisposición a renovar que cuando se trazó en el club la estrategia para renovarlo, justo antes del partido contra el Barça en la Copa del Rey, tal y como desveló este periódico a principios del mes de febrero. El Valencia activó entonces los mecanismos para blindarlo en una apuesta que pasaba por una mejora, extensión de contrato y subida de una cláusula de rescisión que, después de estar en el escaparate del primer equipo durante un buen tramo de la temporada pasada, lo convierte en un atractivo para muchos clubes. Tras la destitución de Gary Neville, Fran pronto desaparecería de la dinámica del primer equipo y esta temporada no encuentra sitio en el filial. Por empeño no será...

Fran lo pone todo de su parte

El joven futbolista, pese a la incertidumbre que se anuda en torno a su figura, está metido al cien por cien, realiza entrenamientos complementarios para fortalecer su físico -el argumento esgrimido por algunos en el club- y está centrado al máximo en convencer a Curro Torres y abrirse paso en un Mestalla de perfil bragado, con algunos veteranos de guerra, donde comenzó siendo el jugador número doce para el técnico, que mimaba su progresión teniéndolo recogido tras una temporada de inestabilidad. Todo cambió para él tras el partido ante el Ebro, donde cargó con las culpas del empate del filial en un partido que tenía encarrilado. A partir de entonces el canterano pasaría 270 minutos sin jugar y su protagonismo desde entonces es más bien medido, a pesar de que con cuentagotas, desde el banquillo, ha dejado buenas comparecencias, como ante el Villarreal. Su futuro, salvo que se produzca un golpe de timón, está en el aire. El Manchester lo conoce bien y lo pretende como una inversión de futuro a medio plazo. Primero iría al el Reserves. En los últimos meses no ha habido contactos para renovarlo.