Adrian Ilie aterrizó en Mestalla en enero de 1998 tras despuntar en el Galatasaray y permaneció en el Valencia CF hasta que fichó por el Alavés en la temporada 2002/03 en pleno declive de su carrera, lastrada por las lesiones. Sus inicios en el conjunto blanquinegro fue espectacular, anotando 12 goles en la segunda vuelta de campeonato, lo que le convierte en uno de los fichajes de invierno más brillantes que se recuerdan en LaLiga junto a Aimar.

Su apodo se lo puso Claudio Ranieri asegurando que era "letal, como una cobra, que te pica y te mata".

Sus grandes dotes para el fútbol no fueron aprovechadas al completo y ello le llevó a pasar sin pena ni gloria por Alavés, Besiktas, FC Zürich y el Terek Grozny ruso tras tres años retirado. A día de hoy, el exinternacional rumano se dedica a administrar una serie de edificios, una discoteca e incluso una serie de instalaciones deportivas mientras representa a futbolistas.

Adrian Ilie, en la final de Copa frente al Atlético de Madrid

Adrian Ilie, en la final de Copa frente al Atlético de Madrid