Manolo Gabbiadini, Gianluca Lapadula y Simone Zaza. Cesare Prandelli ya tiene perfilada su lista de delanteros. El catálogo no está cerrado y depende del mercado, pero sus primeras propuestas están marcadas. El entrenador italiano ha digido el objetivo hacia los futbolistas y el fútbol que mejor conoce: los tres son atacantes moldeados en el Calcio, no son novatos y tienen categoría internacional. Gabbiadini debutó en la Azzurra durante el mandato del entrenador valencianista como seleccionador, Zaza fue citado por Antonio Conte para la Eurocopa de Francia y Lapadula es la novedad en la última convocatoria de Giampiero Ventura. La misma fuente, pero estilos distintos. Porque aunque los tres tienen puntos en común (los tres son zurdos), cada uno pertenece a un escuela distinta de delanteros.

Así juega Gabbiadini

Así juega Gabbiadini

Gabbiadini es el talento cristalino, la clase y la elegancia, Si bien, parece más hecho para jugar como segundo delantero y arrancar desde la banda, que para finalizar en el área pequeña.

Así juega Zaza

Así juega Zaza

Zaza resulta más rústico a la vista, pero sorprende por su gama de recursos técnicos, su potente zancada, su trabajo sin balón, por su visión y disparo. Cuerpo de delantero clásico con iniciativas de calidad. No por casualidad jugó para la Juve la temporada pasada. Gabbiadini no llegó a dar el paso, pero estuvo cerca: la Juve compartió su propiedad con Atalanta y Sampdoria, hasta su llegada a Nápoles.

Así juega Gianluca Lapadula

Así juega Gianluca Lapadula

Lapadula llegó al Milan en verano tras arrasar como goleador en Lega Pro (tercera categoría en Italia) y Serie B (segunda división). El italo-peruano es el punta con más pegada de los tres, el más limitado en el apartado técnico, el menos agradable de ver, pero el más caliente en la pelea y en cuerpo a cuerpo. Vive el límite, ataca los espacios (aunque es más agresivo que rápido) y busca todo tipo de remates. Es un guerrero, aunque ha acusado el salto de categoría.

Hoy, los tres aparecen como alternativas para el Valencia porque caminan lejos de su mejor versión. Son futbolistas por recuperar. Cesare Prandelli tendría que ejercer de psicólogo con ellos, brindarles un contexto de máxima confianza y continuidad. Justo lo que no han encontrado en el West Ham, el Milan o el Nápoles.

Gabbiadini está deprimido; Higuaín le dejó sin protagonismo y no termina de dar el gran salto, incluso sin competencia, porque Milik lleva varias semanas lesionado. Fichado por Rafa Benítez, llegó tras arrollar en la Sampdoria de Sinisa Mihajlovic, donde aparecía desde la derecha (rompiendo en diagonal) dentro de un tridente con Eder por izquierda y Okaka-Chuka como punta. Tiene velocidad y un gran golpeo de zurda. En esta etapa dejó un buen puñado de goles a balón parado y desde fuera del área. No es un jugador para jugar entre centrales y sí para correr a la contra.

Zaza también te permite correr, pero está más hecho para fijar a los centrales; trabaja para el equipo, activa la segunda línea y se maneja mejor dentro del área, donde impone sus centímetros y sus recursos. En el West Ham y en la Juve no ha cuajado y eso deja dudas. Cierra el triángulo Lapadula, que marcó su primer gol con el Milan la semana pasada. Pese a todo, tiene un punto de ´Diego Costa´ que le puede venir bien al Valencia. Ventura no lo ha convocado por capricho. Tiene carácter, fuerza y hambre de gol.