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Peter Lim, Cesare Prandelli y Jesús García Pitarch tienen la última palabra. Ellos deciden qué necesita el equipo en este mercado invernal. De momento, y teniendo en cuenta que las circustancias pueden cambiar, la decisión es firmar un delantero centro que ayude al equipo en la faceta goleadora... si no cambian mucho las cosas. ¿Qué puede hacer que cambien las cosas? Pues está en manos de los futbolistas. Concretamente en manos de Rodrigo, el elegido para ocupar la demarcación de delantero centro tras la venta de Paco Alcácer al FC Barcelona el pasado mes de agosto.
A falta de la reunión definitiva entre el propietario, el entrenador y el director deportivo, la realidad es que en estos momentos el club tiene asumido que tendrá que fichar un delantero goleador en el mercado invernal. Al respecto conviene recordar que el perfil definitivo del punta que pueda fichar el club de Mestalla depende de muchas variables, y algunas tan importantes como el dinero. En este sentido, el Valencia está pendiente de la decisión final de la Unión Europea respecto de la sanción por el aval de IVF a la Fundación en 2009, o mejor dicho, está pendiente de si las instituciones europeas le dan la cautelar, medida que permitiría al Valencia no tener que pagar o depositar en una cuenta bloqueados 24 millones de euros este mismo mes de noviembre, lo cual limitaría mucho las opciones en el mercado.
Por ello, como decía este periódico ayer martes, en el club se trabaja en todas las direcciones, es decir, ahora se recaba información ante la posibilidad de que no se pueda hacer un fuerte desembolso -si se da esta opción se contempla que venga un delantero en calidad de cedido-, pero tampoco se descarta en absoluto que Peter Lim tire mano de la chequera y se apueste por un delantero poniendo dinero sobre la mesa.
El director deportivo Jesús García Pitarch y el entrenador Cesare Prandelli ya tienen una primera lista de futbolistas de ataque del agrado del técnico, que como es lógico, tiene la última palabra porque es quien alinea a los jugadores, y algunos de ellos incluso los ha propuesto él porque los conoce perfectamente de su etapa en el fútbol italiano. Se trata de Manolo Gabbiadini del Nápoles...
Simone Zaza, delantero que juega en West Ham de la Premier Legue cedido por la Juventus de Turín...
y Gianluca Lapadula, jugador que milita en el Milan en su primera temporada en la elite del fútbol italiano tras marcar cuarenta goles con el Pescara en segunda división la temporada pasada.
Al margen de estos tres futbolistas de origen italiano, los técnicos siguen trabajando ante la posibilidad de que haya que reforzar al equipo en otras posiciones. De ser así, se contempla la opción de fichar un futbolista en el centro del campo aunque para ello es vital la opinión del entrenador, Cesare Prandelli. El italiano ha jugado hasta el momento con un centro del campo de tres con Enzo Pérez y Mario Suárez por delante de la defensa, y Dani Parejo como hombre más adelantado enganchando con el ataque. Cuando no ha tenido a Enzo, como fue el partido de Vigo, optó por Medrán junto a Mario Suárez, y dejó a Parejo por delante.
Sobre la posibilidad de fichar un hombre en el centro del campo teniendo en cuenta que Prandelli juega con tres y tiene a cuatro más el canterano Carlos Soler, ya se pronunció el director deportivo valencianista en una entrevista concedida a este diario: «quizás tener un seis, seis... podría ser importante. Pero también es una valoración técnica que depende del entrenador. Igual para él es una complicación tener otro seis u otro ocho, quizás puede querer un diez... ahí es donde entrenador y dirección deportiva deben hablar, y con la secretaría técnica, buscar el perfil de lo que el entrenador quiere». Dicho de otra forma, Prandelli tiene la palabra. Los técnicos buscan.
