El portugués Joao Cancelo era uno de los protagonistas del partido del Valencia. Regresaba a Mestalla después del encuentro del pasado fin de semana en el que tras marcar un bonito gol, mandó callar a la grada del estadio blanquinegro. Aquello le supuso una sonora pita por parte de los aficionados hasta el punto que el lateral derecho portugués se vio obligado a pedir perdón públicamente.

Lo hizo primero con los gestos de la mano y después ante los micrófonos de BeinSport, todavía a pie de campo. En el encuentro ante el Celta de Vigo, Cancelo ha estado muy serio los noventa minutos, se le ha visto muy concentrado y sin gesticular. En lo deportivo, ha sido uno de los más destacados, hasta el punto que suya es la asistencia del primer gol del Valencia, que marcaba Parejo llegando desde atrás y que le daba el empate a uno. Se había adelantado el equipo vigués por medio de Gustavo Cabral.

En la celebración del tanto por parte de los futbolistas del Valencia, se pudo ver de nuevo a Cancel pedir perdón a la grada juntando las dos palmas de la mano. Y lo mismo hizo al final del encuentro, ya que incluso se dirigió hacia la Curva Nord para disculparse. Mestalla y Cancelo parecen haber pasado página.