"Hay jugadores por los que no vamos a escuchar ofertas"

Unas semanas después de aterrizar en València, ¿cuál es su diagnóstico? ¿El Valencia está como esperaba? ¿Está mejor o quizá peor?

El tiempo te va dando perspectiva, información y te hace tener una visión que claramente varía sobre lo que a priori uno ve desde fuera. Uno analiza lo que se ve desde el punto de vista del aficionado, este es un caso especial, que concita la atención de cualquiera, porque es un club grande que ha estado estos últimos dos años en una situación complicada. No solo por la clasificación, también por lo que transcendía mediaticamente y por la crispación colectiva. Y llegado a este punto está claro que no es un tiempo suficiente para que yo tenga absolutamente claro y definido lo que pasa y lo que hay, porque tampoco son tantos días, pero sí que tienes una perspectiva un poco diferente. En cualquier caso, digamos que yo veo que hay inestabilidad, que el club está inestable como entidad y, en consecuencia, en el aspecto deportivo. Esta inestabilidad deportiva lleva a una crisis institucional y crisis social porque el aficionado no está contento.

Es una ecuación lógica.

Todo tiene interrelación, entonces, digamos que yo llego al club fundamentalmente para que exista una persona que sea la representación del club ante todos, ante los medios y los aficionados. Ese es un trabajo que yo tengo asumido y que voy a hacer al cien por cien. Y segundo, para hacer un trabajo de puertas adentro que es un trabajo de análisis de la estructura del club y por supuesto de gestión y, por ende, cómo y de qué manera podemos conseguir una paz institucional. Todo entra dentro de un proceso, ya que la paz institucional viene provocada por la tranquilidad social, la tranquilidad del aficionado, que vuelva a centrarse en lo deportivo y se olvide un poco de los aspectos empresariales e institucionales. En ese proceso estamos, yo de momento estoy contento y agradecido a los aficionados y a los medios de comunicación por la acogida que he tenido. La verdad es que la gente ha estado muy correcta e incluso cariñosa conmigo en la calle. Con los medios de comunicación también muy bien, quizás en algún momento pensé que habría reticencias, lo que sí he percibido es que los partidos en Mestalla la gente se lo ha pasado muy bien, ha disfrutado, ha estado con el equipo y ellos han contestado y han respondido muy bien en cuanto a actitud, ganamos dos partidos y hemos empatado uno, pero incluso el día del empate.

Usted dijo en su presentación que no le gusta empatar.

A mí no me gusta empatar, nunca pero hubo una cierta conexión con la grada, el público creo que se fue satisfecho no tanto del resultado, pero sí de lo que había visto sobre el campo y eso es el inicio de un camino que para mí creo que es fundamental: conseguir cierta tranquilidad, cierta calma, y a partir de ahí trabajar y conseguir centrar los focos en lo deportivo y dejar de centrarlos en lo institucional, porque yo creo que al aficionado es lo que le interesa. Podemos discutir, pero el objeto, el interés social, que se centre en el campo. Eso es algo que no se consigue rápido, no es tan fácil, porque hemos tenido dos años ciertamente convulsos, pero en esa tarea estamos.

Es un avance que diga que hay un problema institucional después de que la presidenta Layhoon lo negase durante más de un año. ¿A qué cree que responde eso?

Lo que ha pasado te sirve para prevenir y mejorar el futuro, pero realmente, hacer un análisis retrospectivo de tantas cosas que han pasado y de tantos problemas que ha habido, pues no sé si nos conduce a un buen camino. No pierdo mucho tiempo en eso, porque muchas veces me dicen eso de, ´¿sabe usted que aquel día pasó eso?´, pues mire, se que pasó eso, las causas o el porqué, pues no tengo demasiado tiempo para dedicarme a ello. Lo que me gusta es mirar al presente y hacia delante, sí que tengo en la cabeza lo que yo creo qué puedo aportar y cómo me gustaría ayudar a que fuese el Valencia del futuro. Me esfuerzo y por tener un camino en esa dirección, y esa dirección es, por un lado el clásico ´dar la cara´. Siempre me ha gustado afrontar las cosas, afrontar los problemas y que se sepa que hay una interlocución, alguien que va a contestar por el club a todo, he estado con ustedes, he estado con muchos medios, pero cuando lleguen los problemas, que van a surgir de todo tipo, lo que yo puedo garantizar es que, primero, yo asumo mi responsabilidad y, segundo, voy a estar ahí para decir lo que deba decir y lo que el club considere ante cada situación o cada problema. Eso por un lado, y por otro, aportar una serie de conceptos a la organización, conceptos que ya conocen porque me he reiterado en ellos y los dije, en cuanto a las formas de funcionamiento y en los valores que deben presidir la gestión del club, para tratar de mejorar por ese camino, y por supuesto, cuidar la parte deportiva, que al final es fundamental porque está conectada con el resto del club. Ya que el concepto de ´tengo buenos jugadores y buen equipo, ganamos, tengo malos jugadores perdemos´, pues no es así. Un club es un entramado en el cual el resultado final, lo que vemos en el campo, responde a muchas otras cosas, como elementos de comportamiento social, elementos internos, de entorno del jugador, de concepto, de exigencia€ Al final ese es el producto. Luego se dice ´si este es buen o mal jugador, cómo puede ser que rinda en un club y aquí no rinde´, todo eso va en función de muchas variables que se ponen en el entorno del equipo, en donde el entorno inmediato es el club y el entorno secundario es la prensa y afición. Y digamos que este es el camino. Por lo tanto, más allá de decir lo que ha pasado o porqué, lo que puedo decir ahora es que hemos pasado por una época de inestabilidad. ¿Qué buscamos?, estabilidad. ¿Cómo buscamos la estabilidad? Con trabajo, en la parte pública y en la parte interna, y por supuesto en la parte deportiva.

Un ejemplo de esa manera de trabajar, donde hay un trato inmediato con el futbolista, es el mensaje público que da Mateu Alemany sobre Cancelo. Cancelo hace una cosa que todos admitimos que es un error, el director general, el propio jugador, nadie dice que no es un error.

Yo no soy de entrar en los vestuarios, como director general de esta casa y como portavoz del club voy a entrar en todos los temas deportivos, sociales€ Eso no me preocupa en absoluto ya que el tema deportivo es la base del club, por lo tanto es lo más importante ya que en la entidad al final lo más trascendental son sus futbolistas y su primer equipo.

Pero ante un hecho que sucedió, ha habido una acción-reacción.

Claro, es que eso es lo que debe ser, otra cosa es la atención pública que tengan las cosas. Otros temas no pueden y no deben tener transcendencia, aunque la tienen pero claramente un club que tiene una forma de hacer las cosas y una forma de reaccionar tiene que estar preparado para cualquier crisis, ya sea individual, colectiva o institucional, cualquier problema. Para decirlo de una forma cotidiana debes de tener una reacción instantánea y eso pertenece a lo que es una cultura del club. Ante esas situaciones debemos tener un protocolo de reacción interna como externa.

Hubo una buena reacción del club, porque a consecuencia de esto el futbolista está jugando mejor.

Estoy de acuerdo. Para él esto fue bueno, ya que aprendió mucho esa noche y yo creo que también hay que decir y hay que valorar que el futbolista con lo caliente que estaba, con las pulsaciones a mil, acababa de marcar un gol y tuvo la claridad mental y la humildad de pedir inmediatamente perdón, tanto en el propio césped como ante los medios de comunicación. Lo valoro mucho y me pareció una buena acción.

A parte de decir lo que dijo, ¿habló con él en privado?

Hay un ámbito que profesionalmente yo nunca he traspasado y es hablar de cosas de carácter interno o económico-deportivo. Lamentablemente no puedo hacer más comentarios que los que ustedes ya conocen...

Pero hay situaciones similares que son públicas como la negociación con Carlos Soler, sus han estado sus agentes en las oficinas...

Los agentes han estado en las oficinas, pero hay muchos agentes que pasan por aquí, y además son agentes de otros jugadores.

¿Pero hay una negociación con Carlos Soler? ¿Va bien? ¿Va mal?

Tiene que tirar el vídeo atrás y le digo lo que le he dicho antes.

¿Y qué plan tiene el Valencia con Carlos Soler? Porque ahora mismo es el favorito de Mestalla.

A mí me encanta que la afición tenga favoritos, porque es lo más importante en el fútbol. El ídolo es siempre lo que crea la mayor afición, desde pequeñitos nos ha pasado a todos. Yo lo único que puedo decir de Carlos es que es un jugador que ha evolucionado muy bien y es un jugador muy importante para el club.

De ahí se puede deducir alguna cosa ya.

Hasta aquí puedo leer...

¿Y los planes que tiene el club para Voro? Porque usted dijo que ya tiene un puesto pensado para él.

A ver, el plan de Voro es que nos queda ahora un final de temporada importante, ese es el plan inmediato. Yo lo que digo del míster es que primero está haciendo un gran trabajo, eso es algo evidente que todo el mundo está absolutamente de acuerdo y lo que está haciendo ahora tiene todavía más mérito cuando cogió al equipo en las circunstancias que lo cogió y las dificultades que tenía. Además siempre lo ha hecho muy bien, siempre que tenía esa obligación. Segundo, que yo ahora que lo conozco más personalmente es una gran persona y un gran profesional, y por encima de todo es en mayúsculas un hombre de club, un hombre con la visión de la entidad, con una estimación tremenda, y por lo tanto es un activo de la entidad y que va a estar en el club, por lo que a mí respecta, toda la vida en esta casa. Entonces, a partir de aquí, en qué puesto o qué responsabilidad esté... Voro puede hacer muchas cosas porque tiene cualidades para hacer muchas cosas diferentes. ¿Que yo pueda tener ideas para un futuro a medio o largo plazo? Pues también pero no tiene mayor importancia, lo sustancial es que está haciendo un gran trabajo como entrenador, es un hombre de la casa y una persona muy valorada por nosotros, por mí en concreto, que solo lo conocía de vestuarios, cuando jugábamos en contra y todo eso. Ya me parecía una persona correcta pero ahora que le he conocido un poquito más pues le tengo esa moderación.

¿Y hace falta algo más para ser entrenador? Si es profesional, ha hecho un gran trabajo, es un hombre de la casa...

Yo creo que después cada circunstancia, cada momento y cada situación necesita una definición determinada. Nosotros estamos en un proceso interno, yo soy recién llegado pero la dirección deportiva lleva ya un tiempo trabajando para determinar cuál es la mejor alternativa que podamos tener para el futuro. En ese proceso estamos. Yo lo siento mucho, porque la afición querría tener la noticia ya, pero no es el momento, porque aún estamos en competición y yo ya dije el primer día que para mí no es lo mismo estar en un puesto que otro. Tenemos la obligación de terminar la temporada dándole una cierta alegría a la afición, que creo que se lo merece después de todo lo que se ha sufrido y por eso estoy contento por los últimos partidos, especialmente los de Mestalla que es donde la gente los vive más en directo. A ver si somos capaces de seguir en esta línea hasta final de temporada, ya que para mí esto es importante, no es secundario. La gente dice que ya está, ya estamos salvados, ya no llegamos a estar arriba€ Y es importante por los futbolistas, que están demostrando que son buenos jugadores, porque cuando las cosas iban mal pues parecía otra cosa pero no es verdad, el equipo tiene calidad, hay mucha calidad y cuando le ha tocado jugar a gente que no es habitual y han demostrado que tienen hueco en la plantilla. Yo veo que hay calidad. Yo eso lo veo, y además no es lo mismo ver el fútbol en televisión que en directo, ya que en directo uno se da cuenta más de las cosas. Estamos en ese proceso, en donde nuestra prioridad es la competición.

Mateu Alemany está en su derecho, da vueltas y no termina de entrar en la sustancia. Esto no es un consejo, porque cuando un periodista da un consejo queda muy mal. Parece casi una amenaza.

A mí me encantan los consejos, escucho los consejos de todo el mundo e intento aprender de todo el mundo, lo acepto totalmente.

Uno de los problemas de Meriton además de la gestión, ha sido la inadaptación que ha estado apunto de romper el cordón umbilical entre el club y afición. ¿Alemany valora que haya aparecido una figura que sí aglutina todo esto que es Voro, más allá que el año que viene sea o no el entrenador?

No me gustan los personalismos. Somos muchos trabajando en este club, hay muchos aspectos y nadie es imprescindible y nadie hace las cosas solo. Creo que cuando un objetivo se consigue pues lo hace mucha gente, lo hacen varios segmentos del club y con ello, no resto un ápice de mérito a Voro, que como he dicho antes, ha hecho un trabajo extraordinario cogiendo al equipo en unas circunstancias complicadas y haciendo luego muy buenos números. Recuperar esa sintonía entre afición y equipo es una cosa que nos corresponde un poco a todos, cada uno con su responsabilidad, Voro tiene la suya, los jugadores y el club, las peñas también y aquí una persona o pocas personas no consiguen nada. Un club se hace en grande en base a mucha gente, de muchas sinergias positivas, de mucho empujar, de que todo vaya en la misma dirección, empujar en la misma dirección es el mejor ejemplo, si cada uno tira para un lado la cosa no se mueve. Entonces para progresar en el camino que queremos, en el camino de la identificación y el camino de la exigencia y la excelencia tenemos que empujar todos, el club es todos, una estructura, una propiedad, un equipo, es Paterna, son los aficionados, la prensa€ Todo son fuerzas que intervienen y al final si conseguimos que esas fuerzas empujen el barco a el mismo camino nosotros iremos por buen sitio.

¿Tenía reticencias a cómo le pudiese recibir la afición por su poco pedigrí valencianista?

No, no. Pedigrí tampoco. Es un cargo profesional. Lo de antes lo decía por la inestabilidad que tenía el club, ha llegado un momento que parecía que casi cualquier decisión que tomase la entidad era mala. De Voro no puedo decir más de lo que he dicho. En cualquier ámbito que esté del Valencia siempre aportará por sus conocimientos, implicación y por cómo es como persona. He dicho que es un activo del club y estará en el Valencia todo el tiempo que él quiera.

Va captando cómo está el club en cuanto a la apuesta deportiva para la próxima temporada. ¿Qué le puede decir a la gente?

Lo más importante de todo para mí es que cuando me siento en la silla de mi despacho, cuando acepto el cargo de director general de esta casa y vengo a ser el máximo ejecutivo, es que tengo muy claras las cosas. En mi vida siempre he tratado de ponerme el listón muy alto, también a los que trabajan conmigo. Es mi forma de ser, cada uno es como es. En este caso, ya no es lo que yo diga. Es lo que hay. Cualquier persona que trabaje en el Valencia sabe en el club que está. No está en otro club. El futbolista, el empleado o el ejecutivo que esté en el Valencia sabe que es un club que tiene una historia extraordinaria, con una afición muy fuerte y tenemos que tener un nivel de exigencia máximo. No voy a dar objetivos concretos porque me suena a demagógico pero sí, inconformismo absoluto y exigencia máxima. Luego igual no llegamos pero a mí me va bien no llegar al máximo de mis objetivos siempre y cuando todo el mundo se haya implicado al cien por cien de sus capacidades. Para implicarse al cien por cien uno tiene que saber dónde está, saber dónde queremos llegar y saber que nuestro nivel es llegar arriba del todo.

Esa exigencia también emana del aficionado. El valencianista se siente ganador porque en el pasado se han conseguido cosas importantes.

Sinceramente, si yo estoy aquí es porque es este club y porque está en condiciones de exigirse estar arriba del todo. No concibo las cosas de otra manera y me encuentro un club que ya las exige de por sí. No es una situación en la que lo normal sea estar en una situación media y tú exijas estar más arriba. En este caso, somos el Valencia y como tal tenemos que optar a todo.

A Meriton ya no le valen las palabras, la gente espera hechos.

Al final el aficionado lo que quiere es que esos hechos se tienen que volcar en el césped, en tener un equipo de calidad, competitivo y que conecte con la gente. Un equipo que haga disfrutar a todo el mundo. Al final es así. Pero para que eso funcione, yo mantengo que tienes que tener buenos futbolistas y el Valencia ya los tiene, pero realmente necesitas que realmente funcione todo en el entorno adecuado para que esos futbolistas den la calidad que tengan. Y eso pasa también por el entrenador, por mil cosas€ Esos hechos deben trasladarse al terreno de juego. Hay una correlación entre lo que tú ves en el terreno de juego y lo que hace el club a nivel de gestión. Ahí es donde yo creo que puedo aportar algo. Esto es un juego y en él influyen muchas cosas, la fortuna es parte del juego, pero creo que a corto y a medio plazo la suerte se equilibra y si las cosas se hacen bien salen bien. Vamos a intentar hacer las cosas bien y partiendo de dos años malos no nos podemos equivocar.

Estos dos años y las limitaciones de la Liga mediatizan el presupuesto del año que viene.

No es lo mismo un presupuesto sin jugar Champions League que un presupuesto con esos ingresos pero el Valencia, con el presupuesto que va a tener, tendrá suficientes recursos para tener un equipo competitivo.

Hay equipos que históricamente están por debajo pero con los recursos económicos de Europa pueden adelantar al Valencia, como es el caso del Sevilla.

Estoy acostumbrado a gestionar con poco dinero y poco presupuesto, a mí me asusta poco esto.

¿Puede explicar eso de que no va a hacer falta vender futbolistas?

Yo lo que digo es que hay futbolistas por los que nosotros no escucharemos ofertas. Vamos a intentar preservar lo que nosotros creemos que es importante para el futuro del Valencia. Yo no digo que no haya traspasos. Hay futbolistas y no voy a decir cuáles evidentemente por los que no vamos a escuchar ofertas.

¿Carlos Soler?

He dicho que no voy a decir nombres y usted me pregunta uno. Usted es un cachondo (risas). Yo lo que pienso es que lo sustancial aquí es que buscas un cierto equilibrio. El mercado también te da pautas. Tienes que ser consciente de lo que tienes, del proyecto que quieres y para ello habrá que contar también con el entrenador y la dirección deportiva. A mí me gusta trabajar de abajo hasta arriba, discutiendo y consensuando los caminos. Una vez sepamos lo que queremos luego hay que tener la tranquilidad, experiencia y habilidad de estar en el mercado para hacer lo mejor para el club. Muchas veces quieres una cosa pero luego el mercado te ofrece otra y hay que tener la flexibilidad para adaptarse a lo que el mercado te pida.

La afirmación de que no se van a escuchar ofertas por determinados jugadores yo la traduzco como que esos futbolistas solo saldrán si alguien paga la cláusula.

Yo le puedo decir lo que le puedo decir. Al final, de todas maneras, la prueba del algodón son los resultados deportivos. Lo más importante es tener buen equipo, tener a la afición ilusionada. Con esto funcionan las cosas. Los nombres, las personas€ Tienen su importancia pero lo más relevante es que tengas un concepto claro, una filosofía y que actúes en consecuencia. Lo pasado, pasado está para mí, a mí lo que me interesa es el presente y el presente es el próximo partido. El presente es una sensación de cierta calma y nueva ilusión de la gente con el equipo. En el medio plazo nos enfocamos al mercado de verano con el objetivo de tener unos resultados diferentes el año que viene.

La dinámica y la inestabilidad de los últimos meses ha deteriorado mucho las cosas y hay jugadores importantes que han pensado en irse. ¿Se puede recuperar a los jugadores también con esa nueva ilusión?

Yo ahora mismo veo al equipo y veo a todo el mundo muy metido y con muchas ganas. Lo que pueda pasar mañana, las situaciones personales y profesionales de los jugadores, yo lo respeto porque cada uno como profesionales pueden tener sus motivaciones y eso hay que respetarlo. Claramente nosotros queremos gente en el equipo que esté implicada y que tenga ilusión. Por lo que veo ahora hay una competencia fuerte en el equipo porque el día que ha faltado alguien el que ha entrado lo ha hecho empujando. Es verdad que han pasado cosas y he leído cosas pero yo diría que todo el mundo está muy contento.

¿Cómo valora el trabajo de Alexanko y Vicente?

Acabo de llegar, ellos están acumulando trabajo, están levantando una secretaría técnica y lo que puedo decir es que mi relación con José Ramón es muy buena. Estamos trabajando día a día y tenemos muy buena comunicación.

El Valencia tiene fichado a Maksimovic y Alexanko y Vicente fueron a verlo a Marbella. Eso le gustó a la afición.

Lo normal es eso. Sé que las cosas se han hecho mal... Si no yo no estaría aquí, estaría en Palma. Veo que Alexanko y Vicente están trabajando, están viendo jugadores.

Por último. Salva Ruiz, que ha sufrido una grave enfermedad, acaba contrato el 30 de junio. ¿Hay algún plan con él, se ha valorado ofrecerle seguir en el filial?

Conozco la situación, es un tema que hemos hablado pero es un tema que lleva José Ramón Alexanko. Supongo que también tendrán que hablar con el futbolista, él deberá tener constancia primero.