Hugo Guillamón estaba mucho más tranquilo que su familia cuando asumió la responsabilidad de lanzar el quinto penalti y clasificar a la Selección Española para la final del Europeo Sub’ 17. Los nervios se apoderaron de los familiares y amigos en l’Eliana cuando le vieron aparecer por la televisión. "Lo tira él!" Calma, sin embargo, es lo que sorprendentemente rondaba por la cabeza del canterano de 17 años y, sobre todo, del propio Santi Denia. El seleccionador nacional fue quien le pidió a Hugo que tirara el último. Tenía plena confianza en él.

SUPER conectó con su hotel de concentración en Croacia para hablar con el héroe de la Rojita y conocer la intrahistoria de ese penalti que ha hecho posible la final contra Inglaterra de mañana y ya ha pasado a la historia de las categorías inferiores de la Selección.

"Cuando nos juntamos todos el míster empezó a preguntar quien quería tirar. Vino a mí y me dijo si quería tirar y le dije que sí. Él fue el que me dijo que yo tiraba el quinto. Es un penalti de mucha responsabilidad, como el primero. Se lo dio a Abel para que lo metiera porque tenía mucha confianza en él a pesar de que había fallado uno en el partido". La primera intención no era lanzarlo a la izquierda del portero. ¡Lo iba a tirar a la derecha! Sin embargo, se cruzó con Chust, el último lanzador, cuando iba hacia el punto de penalti y su consejo lo cambió todo. "Al principio lo iba a tirar al otro lado porque vi que el portero siempre se tiraba al lado donde al final lo tiré. Pero mi compañero que lanzó antes, Chust, me dijo que le aguantara porque el portero se tiraba rápido. Y eso hice. No estaba nervioso, no mucho, estaba tranquilo, le aguanté y cuando vi que se tiraba se la lancé al otro lado".

El gol llevó a la locura. La de sus compañeros y la de sus familiares y amigos que colapsaron su móvil. "Me fui corriendo hacia ellos, me hicieron un placaje y se tiraron todos encima a celebrarlo, todos juntos. Estábamos muy contentos porque nos lo merecíamos. Fuimos mejores en el partido. Cuando falló Abel el penalti nos vinimos un poco abajo, pero nos animamos a seguir y ganamos. Mi móvil no paró de sonar después del partido, tenía un montón de mensajes. Mis padres fueron los primeros en felicitarme. Me dijeron que se pusieron nervisiosos porque te la juegas a penaltis y no sabes lo que puede pasar, pero estaban muy contentos por mí. Mi hermano mayor me mando un mensaje que me decía que era ‘el puto amo’. Al final del partido me empezaron a llegar vídeos del penalti, de amigos, de familiares, de compañeros. Mis amigos vieron el partido juntos, siguieron la tanda entera y cuando me vieron aparecer para el quinto dicen que estaban ‘cagaos’", recuerda entre risas.

El que no lo estaba era su compañero del Valencia Ferran Torres.Valencia Ferran Torres "Conforme iba caminando, con lo tranquilo que es él, pensé ‘ya estamos en la final’. Tengo mucha confianza en él... ¡aunque sea un poco tonto!", bromea. El Director de la Academia, Luis Vicente Mateo, los llamó para felicitarlos la noche del partido. Las cosas no les pueden ir mejor. Hugo es feliz. "Estoy muy contento del campeonato que me está saliendo. Las semifinal ha sido uno de los momentos más bonitos que he pasado". Lo mejor es que le quedan muchos más por delante. Nadie lo duda. Ni en Las Rozas, ni en Paterna... ni en La Masía. Hugo dio calabazas al Barcelona en 2012. Su carrera hacia el primer equipo del Valencia ya ha comenzado.