El Valencia CF centra sus esfuerzos en continuar con la operación salida y poder así lanzarse al mercado a por aquellos futbolistas que ha solicitado Marcelino García Toral. Uno de esos deseos es el central zurdo del Oporto, el santanderino Iván Marcano. Desde el Valencia emana que el mediocentro puede ser lo primero en caer. Pero, por supuesto, nadie en el club olvida las urgencias existentes en el centro de la defensa. De los cuatro jugadores sobre los que asentar un cinturón de seguridad de plenas garantías, a día de hoy Marcelino apenas cuenta con dos, eso, contando con que el mercado brindase la posibilidad de quedarse con el argentino Ezequiel Garay.Ezequiel Garay Una circunstancia complicada para una entidad víctima de estrecheces económicas y en la que el máximo accionista no parece dispuesto a realizar una inversión extra que ayude a fichar.

Por el momento, de los cuatro hombres que deben conformar la columna defensiva del equipo, Marcelino sólo sabe a ciencia cierta el nombre del portero: Norberto Murara, Neto, fichado por seis millones de euros a la Juventus. Garay podría ser el central diestro... o no, y quienes fichan en el club tratan de avanzar la contratación de un zaguero que domine el perfil zurdo y, evidentemente, de un mediocentro posicional que equilibre el centro del campo y sirva de conexión entre la defensa y la línea medular. Iván Marcano es el central de perfil izquierdo ideal en los planes que traza en su cabeza el nuevo técnico del Valencia. Ninguno de los dos protagonistas ha olvidado que fue Marcelino el que hizo debutar en Primera con la camiseta del Racing a aquel joven cántabro de 20 años que, a día de hoy, con 30 es uno de los tres mejores centrales de la Liga NOS en Portugal. Una lesión, precisamente frente al Almería en el estreno, que apartó al canterano varios meses y retrasó su explosión al año siguiente, ya sin Marcelino, pero con el Racing en Europa gracias al míster asturiano.

Iván Marcano y Gabriel Paulista, brasileño del Arsenal, son dos zagueros que siguen en el punto de mira del Valencia. La opción del español puede definirse como una apuesta segura. El ex de Racing, Villarreal y Getafe reúne prácticamente todos los condicionantes que quiere Marcelino para el eje de la zaga. Experiencia en la Liga, donde suma 81 partidos, rendimiento competitivo al más alto nivel, como ha demostrado con la camiseta blanquiazul de los ‘Dragoes’ durante las tres últimas campañas, intensidad, centímetros y un perfecto posicionamiento táctico en el perfil izquierdo, desde donde además ofrece una correcta salida de balón.

Si, finalmente, el Valencia traspasara a Ezequiel Garay por una suma próxima a los 20 millones, en la caja habría líquido disponible para fortalecer la posición de ‘6’ y el centro de la defensa. En un contexto sin el argentino, Alemany y Alexanko estarían obligados a traer a Marcelino un mínimo de dos centrales. Un número que el técnico ve adecuado incluso con Garay en plantilla, sin olvidar que lo acordado en las primeras reuniones de planificación con el técnico fue la llegada de tres nuevas piezas en el centra de la defensa. De una u otra manera, Marcano se mantiene entre los principales objetivos del Valencia. El interés, por expresa voluntad de entrenador, es firme, aunque la operación no es sencilla y podría alargarse hasta el mes de agosto, siempre, en función de la fuerza que esté dispuesto a hacer el futbolista por ser blanquinegro.

Por ahora, Iván Marcano ya ha puesto su grano de arena. El contrato del jugador con el Oporto concluye el 30 de junio de 2018. Hasta la fecha -la última fue hace 15 días antes de que el equipo de Sérgio Conceição emprendiese una gira por México- el de Santander ha declinado cada una de las propuestas de renovación que el club portugués le ha planteado desde la pasada campaña. A los 30 años el defensa no ve con malos ojos regresar a España con el objetivo de triunfar en un equipo importante de su país. El Valencia no está sólo en la puja. Betis y, sobre todo, Málaga están interesados en Marcano. El Sevilla tampoco le ha perdido la pista. La baza de Marcelino y el hecho de ser, en teoría, un grande de la Liga juegan en favor del VCF.

La mayor dificultad radica en Oporto. Allí el eterno presidente portista, Pinto da Costa, rechazó una oferta valencianista de 4,5 millones a principio del mercado y se ha empeñado en la renovación de su valladar en la defensa. Con ofertas por Diego Reyes, el incierto futuro de Marcano, que podría salir libre dentro de un año, hace que el Oporto frene de momento la venta del central mexicano y se ha interesado en Pedro Henrique.