Si existe una posición cubierta a corto, medio y largo plazo en el Valencia CF Valencia CF esa es la del lateral izquierdo. Los principales responsables de la Academia miran al futuro con optimismo cuando se trata del carril del ´3´, una demarcación en la que la factoría de Paterna Paterna ha pasado de tener el sello de calidad con la aparición de Juan Bernat -Bayern- y Jordi Alba -Barcelona- a ganarse la denominación de origen al calor de la irrupción en la élite de Gayà, Lato y Centelles en un lapso de poco más de tres años.
Una concentración de talento en tiempo récord que los expertos explican como un fenómeno de repetición de comportamientos y formas de entender -y jugar- el fútbol que va incluso más allá de labores de captación y formación por parte de los técnicos.
Tener buenos futbolistas o jugadores que estén mucho tiempo en un equipo es capaz de generar por sí solo un modelo para los canteranos en formación. Jordi Alba inspiró a Bernat, ambos fueron un espejo para Gayà y así sucesivamente hasta llegar al último eslabón de la cadena de producción. Si hubo una época en la que el Valencia fabricaba centrales, ahora el principal foco se ha instalado en el carril zurdo. Una tendencia menos arraigada tomó cuerpo hace algunos años en la media punta: tras Aimar vino Silva, luego Isco y después Carles Gil.
En el caso de los laterales el modelo se ha extendido tanto a lo largo del tiempo que ha dado pie incluso a una evolución. Desde Jordi Alba hasta Lato todos están cortados por el mismo patrón. Son jugadores de ataque reciclados. Todos pequeños y rápidos. El prototipo de Paterna continúa asombrando allá donde va. Esa tendencia, sin embargo, varía a partir de Centelles, dando lugar a un lateral 2.0, físicamente más fuerte y adaptado al fútbol moderno. El ´32´ estrena el nuevo molde. Mide un metro y 86 centímetros y coordina a la perfección la calidad individual del interior y la fuerza y recorrido del lateral.
El canterano brilló en la pretemporada con el primer equipo sin haber pasado todavía con el filial, protagonizando actuaciones solventes en defensa y atrevidas en ataque, llegando incluso a firmar una asistencia de gol. Su salto al filial no ofrece dudas, se ha asentado como titular y sigue una proyección muy clara. Ayer recibía la llamada de la selección española Sub-19. Con el permiso de Salva Ruiz, que afronta el reto de reinsertarse en la dinámica tras sufrir una grave enfermedad, el siguiente en la línea de sucesión es Fran Cortijo.
Es uno de los principales valores del Juvenil A. No es tan alto como Centelles pero es más fuerte y potente que sus predecesores. Mezcla la estructura con la velocidad y tiene habilidad para el disparo. La temporada pasada, en la que acabó jugando como central, firmó dos de los goles más destacados del recopilatorio que hace la Academia. Ambos con el mismo denominador: eslálon y potencia de disparo. Pertenece a la generación 2000, una de las más prometedoras.
El último en aparecer es Jesús Vázquez. A sus 14 años marca diferencias con el Cadete Fundación en la Liga Autonómica y el Valencia lo ha renovadoValencia ante el interés de clubes como Madrid, Barcelona, Manchester City, United o Chelsea. Es hijo de Braulio Vázquez y da continuidad al prototipo de Centelles. Tiene un gran potencial físico, es muy explosivo y llega con facilidad a línea de fondo. En el Valencia están tranquilos. Saben que tienen laterales zurdos para más de una década. El carril tiene futuro.
