Geoffrey Kondogbia ha encajado perfecto. Ha jugado cuatro partidos, pero se comporta como si hubiese cumplido un par de temporadas en el equipo. El centrocampista está feliz y radiante. La realidad está superando las mejores previsiones. Se han dado todas las condiciones para que su adaptación sea ideal: compañeros, entrenador, afición, ciudad y rendimiento.

Con un par de entrenamientos se plantó en el Bernabéu, liquidó a Isco y marcó un golazo.BernabéuIsco El flechazo fue inmediato. Mestalla llevaba mucho tiempo reclamando un jugador con sus características y Kondogbia también estaba buscando un contexto así: se siente querido y respetado, en todos los sentidos. Justo lo que buscaba.

Ante el Málaga, con todo encarrilado, Marcelino decidió darle descanso pensando en Anoeta. El francés dejó el terreno de juego en el minuto 65 y la ovación de Mestalla fue muy potente. En la banda, esperaba el míster para darle la enhorabuena. Es como un ´padre´. La cara de felicidad de Marcelino es la mejor prueba.

En sala de prensa fue preguntado por el precio de la opción de compra y su respuesta refuerza la teoría: puede convertirse en una de las mejores operaciones del ValenciaValencia. "Las cantidades que se están pagando hoy en día no tienen una lógica, pero está claro que Kondogbia tiene un gran nivel, luchamos mucho por traerlo aquí y él puso mucho para venir. Tiene capacidad y lo lógico, si le respetan las lesiones, es que optimice su rendimiento", analizó Marcelino.

Mateu Alemany y el agente del jugador cerraron la operación perfecta. Kondogbia está cedido por el Inter hasta el próximo 30 de junioKondogbia Inter . El Valencia paga la ficha, que se rebajó. Hasta entonces, tiene una opción de compra -no obligatoria- para completar el fichaje definitivamente por 25 millones de euros. Está firmado. Si todo transcurre de forma ideal, el jugador sería valencianista por cuatro temporadas y estaría blindado con una cláusula de rescisión de 100 millones de euros. Una cantidad en torno a la que hacerse fuerte y un escenario para poder llevar la iniciativa.

Rendimiento, fair-play financiero, clasificación para Europa, posibles ofertas... Es pronto y queda un mundo, pero el Valencia tiene blindado a Kondo. Spalletti sabía lo que podía pasar, por eso trató de retenerle. Pretendía juto lo que está haciendo Marcelino: recuperar su versión de centrocampista total. El Inter pagó al Mónaco en torno a 38 millones en el verano de 2015 y empezó pidiendo 35 millones de euros. La postura del jugador -sólo quería jugar aquí- y el trabajo de su agente (además de la carta Cancelo) fueron fundamentales para dar a luz la que puede ser una de las operaciones del año.

El Valencia puede fichar a Kondogbia por 25 millones de euros. Perspectiva y tiempo. Este verano el Bayern pagó 41 por Corentin Tolisso y el Chelsea puso 40 por Tiemoué Bakayoko. Kondogbia cotiza al alza y ahora mismo no tiene techo: lucha por volver a Europa con el Valencia, selección francesa... Y tiene 24 años.

Apuesta ganadora: llegó por el proyecto deportivo

Kondogbia llegó al Valencia después de vivir dos temporadas difíciles en el Inter.Kondogbia Valencia En el club nerazzurro no encontró el contexto para desarrollar su juego. Primero, por las expectativas que generó su precio y el cartel de la prensa: anti Pogba, que estaba en la Juve. Segundo, por la inestabilidad, entrenó con Mancini, Pioli, Vecchi o Frank de Boer... que le faltó al respeto públicamente y llegó a sustituirle antes de la media hora en un partido. El año pasado se quedó fuera de la lista UEFA del Inter. El francés ha sufrido y por eso buscaba un ambiente de confianza y alto rendimiento donde poder volver a dar lo mejor.

Pese a tener ofertas económicas más potentes, la prioridad de su representante -Daniel Pérez- fue el proyecto deportivo. La ambición del cuerpo técnico y sus planes no dejaron lugar para las dudas. Ahora habrá clubes frustrados por no haber apostado fuerte... como sí hizo Marcelino. Valencia era el sitio ideal y por el Valencia se trabajó. Ahora, Kondo vuelve a sentirse especial e importante; eso es básico para que ofrezca su mejor versión sin cortarse. El jugador agradece los cumplidos, pero lo tiene claro: la temporada es larga y hay que mantener la línea de rendimiento hasta el final.