Marcelino le cogió el punto a Simone Zaza después de aquel Derbi del Ciutat de València en el que algo pasó. Entonces los protagonistas no dieron opción a que la polémica tomara cuerpo, solo unos días después el italiano se desquitaba con un hat-trick frente al Málaga y esa noche fue el inicio de su explosión esta temporada. Logró marcar en seis partidos consecutivos y sus goles fueron clave en la racha histórica de ocho victorias en La Liga. La mano del entrenador para canalizar positivamente el temperamento del futbolista fue clave. Hoy, media vuelta después, Zaza vive un momento radicalmente distinto, el otro lado más oscuro en la vida de un delantero, con el peso de esos más de dos meses sin hacer un gol. El sábado, en Málaga volvió a salir desde el banquillo y cada día es más evidente que la sequía del ‘9’ le ha llevado a perder la titularidad en el Valencia CF.

Lo de Zaza es un absoluto misterio. El Valencia CF decidió reforzar la delantera en el mercado de invierno por si la rodilla del italiano le obligaba a pasar por el quirófano, aunque el jugador no parece haberse resentido en ningún momento de esa rotura parcial del menisco que arrastra desde hace meses. Llegó Luciano Vietto y, finalizado el periodo de rotaciones de la Copa, el argentino fue el elegido en el equipo titular junto a Santi Mina para el Derbi. Ambos marcaron ese día y Marcelino decidió repetir pareja en Málaga con Vietto y Mina, al que el técnico está dando ahora toda su confianza aprovechando un momento dulce en cuanto a efectividad.

Punto de inflexión

Simone marcaba el que es hasta ahora su último gol, el décimo esta temporada, el pasado 9 de diciembre al Celta. Fue el último partido del año en Mestalla, el que el Valencia perdió 0-1 con el Villarreal, el que significó un punto de inflexión en su trayectoria reciente. Ese día fue expulsado por doble amarilla, se perdería el siguiente partido por sanción -Girona- y con la llegada de Vietto y las rotaciones de enero todo su protagonismo pasó a centrarse en la Copa, donde tampoco logró marcar pese a jugar seis partidos completos y una prórroga. En los últimos siete partidos de La Liga solo ha sido titular en uno, en el Wanda Metropolitano frente al Atlético de Madrid, donde por contrato no podía actuar Vietto.

Los próximos partidos van ser determinantes para recuperar la mejor versión del delantero que con Rodrigo llegó a formar durante muchas semanas la pareja de ataque más efectiva de La Liga. La que necesita el equipo con urgencia para afrontar la recta final de la temporada y la conquista de una plaza en la Liga de Campeones. Una vez más, como ocurrió al principio de la temporada, la gestión de esta crisis por parte de Marcelino va a ser fundamental. Sea como titular o como hasta ahora saliendo desde el banquillo, ha de encontrar la manera porque el Valencia CF necesita recuperar cuanto antes la efectividad y los goles de Simone Zaza, el ‘9’.