Marcelino ha comenzado a aumentar las cargas de trabajo en los entrenamientos para llegar a tope al tramo decisivo de la temporada. El técnico del Valencia CF Valencia CF ha puesto en marcha un plan físico para que los jugadores carguen pilas y vuelen hasta finales de mayo cuando concluye la competición liguera. El asturiano ha comenzado a modificar las pautas de trabajo después de un exigente mes de enero con partidos cada tres o cuatros días que no permitían trabajar para nada. Solo había tiempo para aguantar con sesiones cortas y muchas horas de recuperación y gestión de esfuerzos. Ahora, con la llegada de las semanas limpias, hay margen para pulir el físico y preparar a los jugadores para que sus piernas lleguen en las mejores condiciones posibles. El martes, por ejemplo, el entrenamiento duró más de una hora y media con carrera continua por toda la ciudad deportiva de Paterna,Paterna series cortas de cincuenta metros y gimnasio.

La preparación física se ha convertido en uno de los secretos del éxito de este Valencia de Marcelino. Ismael Fernández es el responsable. El preparador físico se ha encargado de que no le falte gasolina al equipo durante toda la temporada. Y la sensación del vestuario es que lo ha conseguido. 'Isma' conecta con la plantilla. Hay complicidad entre el preparador físico y los jugadores desde el primer momento y eso siempre es garantía de éxito.

Desgaste inevitable en enero

Si el equipo ha desfallecido en algún momento durante el interminable mes de enero, como así fue casi inevitablemente, fue únicamente por culpa de la acumulación de partidos -hasta 12 en solo 40 días-, el desgaste físico extra de la Copa del Rey y el potencial de los rivales que coincidieron en el calendario como el Barcelona, Real Madrid o Atlético. Tampoco ayudó haber confeccionado una plantilla corta. Fue imposible refrescar el equipo manteniendo el mismo nivel competitivo alto.

Sin embargo, ese fue un riesgo que Marcelino sabía que podía correr en ese momento puntual de la temporada. Le compensaba teniendo en cuenta los beneficios que conlleva el resto del año. Los fichajes tempraneros en el mercado de invierno de Luciano Vietto -firmado el 4 de enero- y Francis Coquelin -cerrado el 11 de enero- supusieron un alivio para Marcelino no solo en lo deportivo. También en lo físico. Ambos entraron directamente en una rotación necesaria. Aún así, el cuerpo técnico reconoce que ha tenido que precipitar la reaparición de algún lesionado porque el equipo lo necesitaba.Lesiones por traumatismos

Los últimos meses se han caracterizado por muchas lesiones, pero en el seno del equipo la tranquilidad es máxima porque saben que muchas de ellas llegaron como consecuencia de traumatismos desafortunados. Como la lesión en el hombro de Garay al chocar contra Neto, la patada de Sergi Roberto a Andreas Pereira, la entrada de Ángel al tobillo de Carlos Soler o el esguince de rodilla de Gabriel Paulista después de un fatal apoyo.