André Gomes, jugador del FC Barcelona y ex futbolista del Valencia CF, ha reconocido en una entrevista que no lo está pasando nada bien en los terrenos de juego y que no se ve capaz de trasladar a los partidos el buen ambiente y nivel que cree tener en los entrenamientos. Así es el infierno del portugués en el Barça según las sorprendentes confesiones del propio jugador, quien asegura que siente hasta vergüenza de salir a la calle.

"No me siento bien en el campo, no estoy disfrutando de lo que puedo hacer. Mis amigos dicen claramente que voy con el freno de mano en el campo", se sinceró el centrocampista portugués en una entrevista para el número 72 de la revista de fútbol Panenka.

André Gomes se atreve a comparar su estancia en el Barça, incluso, con un pequeño infierno. "Los primeros seis meses fueron bastante tranquilos y bien, con mi tiempo de adaptación, pero luego las cosas cambiaron. Quizá la palabra no sea la más correcta pero se volvió un poco infierno porque empecé a tener más presión", argumentó.

"Con la presión yo vivo bien, con lo que no vivo bien es con la presión para mí mismo. Soy demasiado autocrítico, perfeccionista, no tolero equivocarme nunca y es algo en lo que estoy trabajando para mejorar", apuntó en este sentido el jugador, de sólo 24 años y que llegó al club blaugrana procedente del Valencia CF en julio de 2016 a cambio de 35 millones de euros más una serie de cantidades en función de objetivos.

No obstante ese miedo, esa presión, que tiene en los partidos y que le está llevando a no ser él mismo no la tiene en los entrenamientos. "Entrenando estoy muy tranquilo. Obviamente que hay algún día que estoy un poco mal de confianza porque hasta en los entrenamientos se nota. Sabes que has sufrido. Quizá he jugado el día antes o dos días antes y aún estoy con la imagen negativa del partido, que no me permite seguir adelante", comentó.

Reiteró al respecto que, en los partidos, no es capaz de desarrollar su juego, aquél que los técnicos vieron en él durante su estancia en Mestalla y que hacían presagiar que se adaptaría muy bien al 'ADN Barça'. "En los partidos no doy todo lo que podría porque la sensación que tengo dentro del campo es mala", explicó.

"Pensar demasiado me hace daño. Porque pienso en las cosas malas y, después, en lo que tengo que hacer, y voy siempre a remolque. Aunque mis compañeros me apoyan bastante, las cosas no me salen como ellos quieren que salgan", añadió en este sentido el internacional portugués.

André Gomes solo ha jugado 4 partidos en La Liga como titular, estos son sus números esta temporada.

Sin saber por qué vive esta peculiar sensación, reconoció que él mismo se encierra en sus males. "No me permito sacar la frustración que tengo. Entonces, lo que hago es no hablar con nadie, no quiero molestar a nadie. Es como si me sintiera avergonzado. Me ha pasado más de una vez el no querer salir de casa. Eso de que la gente te pueda mirar, tener miedo de salir a la calle por vergüenza", desveló.

"Me dicen que voy con el freno de mano. Y lo que más cuesta es tener conciencia de todo. Me molesta en el buen sentido que me digan que puedo hacer muchas cosas buenas e ir más allá, y yo me pregunto a mí mismo: ¿y por qué no las hago?", se preguntó a sí mismo un André Gomes que empieza a ser silbado en el Camp Nou, pero que sigue contando con la confianza de su técnico, Ernesto Valverde, con el punto de mira puesto en que supere sus miedos y esa presión.