Marcelino García Toral es uno de los técnicos que tiene en su punto de mira el Nápoles ante la posible marcha de Maurizio Sarri, que según esta información que publica Corriere dello Sport tiene una suculenta oferta del Mónaco de seis millones por temporada.

Hay según este diario una terna de candidatos para entrenar al Nápoles, segundo clasificado de la Serie A y todavía con serias opciones de disputarle el Scudetto a la Juventus.

Uno de ellos es Paulo Fonseca, portugués que entrena al Shakhtar Donetsk. Otro Marco Giampaolo, actual técnico de la Sampdoria. Y el tercero Marcelino García, del que aseguran que está siendo objeto de un amplio seguimiento desde hace tiempo por parte del director deportivo del Nápoles, Cristiano Giuntoli.

Marcelino firmó el pasado mes de mayo con el Valencia CF y tiene contrato por una temporada más. Se desconoce si tiene cláusula de rescisión y, en su caso, la cantidad. El asturiano aseguró que su intención y su deseo es cumplir "como mínimo" esos dos años en València y el club tiene intención de abordar una ampliación de esta relación por dos temporadas más. Ahora mismo, a nadie le pasa por la cabeza que Marcelino García no vaya a sentarse la próxima temporada en el banquillo de Mestalla, el año del Centenario y del regreso a la Champions League.

Sarri, como culminación a una larga carrera en clubes italianos de perfil inferior, llegó hace tres temporadas a Nápoles con la difícil misión de hacer olvidar a Rafa Benítez. Se ha ganado en este tiempo la admiración del fútbol europeo por su estilo, trabajo y resultados, pero también ha llamado la atención de clubes poderosos y dispuestos a apostar, como en este caso el Mónaco con una oferta mareante. También surgió el rumor de un posible interés del Chelsea para ocupar el puesto de Antonio Conte.

El italiano tiene contrato hasta 2020 y una cláusula de rescisión de 8 millones de euros. El presidente napolitano, Aurelio De Laurentiis, lleva meses tratando de ampliar la vinculación y la cláusula ante el temor a una fuga. De momento, la respuesta del técnico, al Nápoles y al Mónaco, es según esta información que su deseo es esperar a que se defina la liga italiana para tomar las decisiones de futuro.

No es la primera vez que el nombre de Marcelino se relaciona con un club italiano. En 2016 estuvo muy cerca de convertirse en entrenador del Inter de Milán tras la destitución de Frank De Boer.