Jeison Murillo está mucho mejor. Inmerson en un proceso de puesta a punto física, el colombiano estuvo fuera de la convocatoria ante Leganés y Espanyol; ante el Barça volvió a la lista y el miércoles será titular ante el Getafe. Marcelino sabe que puede contar con él y la sanción de Gabriel Paulista -por acumulación de tarjetas- le abre las puertas de la defensa. La baja del brasileño es una oportunidad y coincide con la mejora programada en la condición atlética de Murillo. Jeison está deseando volver a competir tras un mes sin participar. Su último encuentro fue ante el Alavés, el 17 de marzo. Entonces, el cuerpo técnico tenía pensado descargarlo, pero tuvo que entrar por lesión de Garay para actuar todo el segundo tiempo. No hay dudas y tampoco lugar para el debate. "Ante el Getafe la va a romper en la cancha, como hizo siempre", confía su entorno. Con Murillo sobre el campo, el Valencia no pierde.

El ritmo fue tremendo después de pasar por quirófano -dos veces- por una lesión de pubis y estar tres meses en proceso de recuperación. Jeison completó los noventa minutos en cinco partidos consecutivos y quedó al límite por el esfuerzo. Su nivel fue correcto, pero no ha llegado a deslumbrar como sí sucedió en octubre y noviembre, cometió errores propios de la falta de ritmo y de la vuelta a la acción. Consciente de que había forzado la maquinaria, el cuerpo técnico apostó por que cargará pilas. No ha habido motivos técnicos.

Recuperar el nivel competitivo

Ezequiel Garay y Gabriel Paulista se han hecho fuertes en la posición en su ausencia. El argentino es el central de la estabilidad -un seguro- y el brasileño se ha confirmado como el soldado de Marcelino. La lesión frenó por completo a Murillo en el mejor momento, cuando su nivel como valencianista estaba alcanzado el tope que marcó en sus primeros meses en el Inter de Milán, cuando fue considerado como uno de los zagueros jóvenes con más proyección. Seis jornadas quedan para cerrar LaLiga y su intención es aprovecharlas al máximo. No tiene que reivindicarse ante Marcelino porque siempre ha tenido su confianza, su objetivo es dar un paso al frente y recuperar el ritmo competitivo perdido. La ausencia de Gabriel por sanción le abre la puerta y confía en ser titular junto a Garay ante un adversario -Getafe- ante el que hay cuentas pendientes.

El mejor central de Colombia

LaLiga termina en seis jornadas y el Valencia tiene virtualmente cerrada la clasificación para la Champions, pero son varios los futbolistas cuyo rendimiento en los próximos partidos puede determinar definitivamente su presencia -o no- en el Mundial de Rusia. Uno de ellos es Jeison Murillo. Los problemas en el pubis le cortaron el paso en el mejor momento de la temporada y desde su llegada al Valencia no ha sido citado por José Pékerman para la selección, pero el contexto mantiene viva la esperanza. Primero, porque al 100% no hay tantos centrales colombianos de su nivel. Dos, muchos de sus competidores para la posición de central no están teniendo continuidad. Y tres, sus datos estadísticos le dejan a un paso del podio de mejores colombianos en el fútbol europeo.

Sólo James Rodríguez (Bayern), Falcao (Monaco) y Juan Cuadrado (Juventus) mejoran el valor estadístico que Murillo está marcando para el Valencia esta temporada; por encima del siete, pese a que su media ha bajado en los partidos previos al descanso que le ha brindado Marcelino. Cada competición y cada equipo determinan un contexto, pero Jeison se defiende por delante de Bernardo, Cristian Zapata o Davinson. Todos presentes en la última lista de Pékerman, junto a Yerry Mina, que sólo ha jugado un partido de liga con el Barça. El seleccionador llamó a un quinto central, Óscar Murillo (Pachuca). Cristian Zapata es el hombre de experiencia, Davinson Sánchez es el presente y el futuro por talento y Mina parece fijo pese a su rol en el Barça. Jeison lo tiene difícil, pero no imposible. Estas últimas jornadas son importantes y necesita hablar fuerte en el campo para llamar la atención de Pékerman... por si los números no bastan.