Kevin Gameiro es el delantero elegido por el Valencia CF y salvo sorpresa mayúscula lo normal es que el fichaje termine fructificando. El acuerdo entre el club de Mestalla y el futbolista es total y ahora falta el acuerdo con el Atlético. Tal y como ha venido publicando este periódico, dadas las gestiones ya hechas por el director general Mateu Alemany y por el jefe del área técnica, Pablo Longoria en el Valencia CF se respira optimismo acerca de la operación, pero al tiempo se transmite que no hay prisa. Si se puede fichar hoy se ficha hoy, pero si es necesario esperar a mañana se esperará un día más, porque más importante que el cuándo se ficha a Gameiro es por cuánto se ficha a Gameiro.

Sea como sea, el acuerdo entre clubes llegará, y a ello contribuirá mucho el papel que juegue el propio futbolista. Gameiro quiere jugar en el Valencia CF y así se lo ha transmitido al Atlético de Madrid. De la voluntad del futbolista por jugar en el club de Mestalla no se puede dudar ya que es la segunda vez que se compromete a expensas de que los clubes lleguen a un acuerdo. La primera vez fue cuando militaba en el Lorient, ahora, ha aceptado bajarse el sueldo anual respecto lo que cobra en el Atlético si bien, el Valencia CF le hará más años de contrato de los que le quedan en el conjunto colchonero, situación que es una práctica habitual en los futbolistas que como él tienen ya 31 años. En el Atlético tiene firmado contrato hasta 2020.

De la primera vez que el actual futbolista del Atlético llegó a un acuerdo con el Valencia quedan todavía anécdotas a las que ha tenido acceso este diario. Tan convencido estaba de que jugaría en el Valencia, que estuvo con su mujer, su hijo y su suegra, en la ciudad y hasta eligió una vivienda para vivir. De hecho, tal y como ha podido saber SUPER, a su suegra y a su mujer les gustó un chalet en la urbanización Torren en Conill, que está en Bétera. No es extraña esta elección ya que se trata de una zona residencial cercan a la ciudad deportiva y donde muchos futbolistas del Valencia.

Concretamente fue un diez de abril de 2011 el día en que Gameiro estuvo en València para elegir la casa en que iba a vivir, de tan convencido como estaba de que terminaría jugando en el conjunto de Mestalla. De hecho, estuvo en el estadio viendo en directo el partido que el equipo entonces entrenado por Unai Emery ganó 5-0 al Villarreal con tres dos de Roberto Soldado. Unos días antes Gameiro había pasado el reconocimiento médico con el conjunto de Mestalla en una clínica de Barcelona en el más absoluto secreto. ¿Por qué no ficho definitivamente por el Valencia CF? El acuerdo firmado que tenía estaba supeditado que los clubes llegaran a un acuerdo, Llorente, presidente del Valencia entonces, ofreció seis millones a pagar en plazo y Lorient no aceptó. Mientras se tensaba la cuerda, apareció el PSG, que acababa de ser adquirido por el fondo catarí y puso 12 'kilos' a pesar de que al jugador le quedaba solo una temporada de contrato. Era el primero de muchos fichajes a golpe de talonario.