La semana que hoy comienza puede terminar siendo vital en las aspiraciones del Valencia de tener un lateral derecho. Como ha venido informando este diario, el entrenador blanquinegro, Marcelino García Toral, quiere trabajar en la concentración de Suiza con toda la defensa al completo. Sea quien sea, lo cierto es que el técnico asturiano está metiendo prisa a Mateu Alemany y Pablo Longoria para que cierren una contratación. Obviamente, esto no significa que vaya a ser cualquier lateral derecho, al contrario, Marcelino quiere que se cierre el fichaje de alguno a los que él ha dado el visto bueno.

Las prisas de Marcelino, si es que se pueden calificar de prisas, tienen una explicación deportiva: quiere tener al defensa de banda derecha en la concentración de pretemporada en Suiza para trabajar conceptos defensivos tácticos con toda a línea de zagueros. No en vano, será en Suiza donde el Valencia comenzará a jugar los primeros partidos amistosos. De hecho, la concentración arranca este viernes y ya el sábado el conjunto valencianista tiene el primer choque ante el Galatasaray.

En cuanto a nombres se refiere, el Valencia se ha visto obligado a abrir un frente nuevo ante la negativa del Atalanta a negociar por el holandés Hans Hateboer, que en un principio era el lateral derecho elegido por los técnicos, pero la oferta valencianista ha sido rechazada una y otra vez por el conjunto italiano. La postura del Atalanta es tan firme, que este domingo Hateboer volvió a jugar en partido amistoso que el equipo de Bérgamo jugó ante el FC Chiasso de Suiza. El sábado pasado ya jugó frente al Brusaporto, también de Bérgamo. Sin que deba tomarse como nada definitivo -si acaso significativo-, lo cierto es que es habitual entre clubes que cuando se negocia por un futbolista y el acuerdo está cercano, el jugador en cuestión no dispute encuentros en los que nada hay en juego para evitar lesiones. En cualquier caso, desde el entorno del propio Hateboer se confiaba, al menos a finales de la semana pasada, en que el club de Mestalla hiciera una nueva intentona por el jugador holandés porque se ha mojado y no poco para forzar su traspaso. Eso sí, durante la semana pasada en el seno de la entidad blanquinegra se respiraba cierto pesimismo al respecto.

Alternativas

De ahí que el Valencia haya maniobrado en busca de una alternativa. Está por ver si se barajan más de una, pero según la información a la que ha tenido acceso este periódico, el italiano Cristiano Piccini es una de ellas. El jugador gusta a Marcelino y en su favor tiene que es una operación viable en lo económico porque el Sporting de Lisboa, club al que pertenece el jugador, sí está dispuesto a traspasarlo por diferentes motivos. Porque ya ha fichado a un jugador para la posición de lateral derecho, concretamente Bruno Gaspar, y porque hay un pacto entre Sporting y Cristiano. El italiano fue uno de los jugadores que recientemente no denunciaron su contrato para salir libres tras los problemas institucionales del club luso, que ahora, está dispuesto a escuchar ofertas por él.