No está siendo fácil el inicio de la tercera temporada de José Mourinho en Old Trafford. El técnico portugués vive uno de sus peores momentos al frente del conjunto inglés. El Manchester United ha logrado solo tres de los primeros nueve puntos en juego, con una sonrojante derrota en Old Trafford por 0-3 ante el Tottenham Hotspur. El Valencia CF es consciente de que es el momento de ir a Mánchester a competir. El club británico es admirado por la propiedad del club de Mestalla y sus vínculos con Lim llegan hasta las raíces de la entidad de Mánchester -el máximo accionista del Valencia CF posee el 'Hotel Football Old Trafford', a las puertas del estadio, y es propietario del 50% del Saldford City junto a los hermanos Neville, Nicky Butt, Ryan Giggs y Paul Scholes, la famosa 'Class of 92' del United-.
El club mancuniano vive una situación convulsa, con José Mourinho en el alambre después de su enésima confrontación pública con la gerencia del club. Desde la pretemporada, el técnico luso demanda unos fichajes que no llegan, sobre todo en la zona de la retaguardia. De hecho, Mourinho no ha repetido línea defensiva en ninguno de los tres partidos disputados en la Premier League, en los que la premisa ha sido similar. El conjunto inglés sabe cómo cerrarse y aprovecha su físico para dejarse dominar e intentar buscar el juego directo sobre Romelu Lukaku, Alexis y Marcus Rashford, con el recurso de Fellaini para la segunda mitad.
El Manchester United cuenta con un futbolista diferencial bajo palos. David De Gea es uno de los mejores porteros del mundo y conforma, junto a Ander Herrera y Juan Mata, la representación patria en Mánchester.
