Athletic y Valencia CF jugaron a no perder y lo rifaron todo a algún acierto puntual o error del contrario para intentar llevarse los tres puntos, cosa que no ocurrió. Entre los reyes del empate, se acabó dando el resultado más lógico, una igualada a cero que prolonga una jornada más la agonía del equipo de Marcelino, incapaz de ganar prácticamente a ninguno de sus rivales desde que la temporada comenzaba hace más de dos meses.
Así, sin Guedes ni Cheryshev, el Valencia salía con Coquelin en la banda izquierda reforzando con músculo esa zona ancha del campo que Berizzo había poblado también con un trivote formado por Dani García, San José y Mikel Rico. Mucho físico ante el que en un principio tomaba la iniciativa Kondogbia, aunque poco a poco se fue diluyendo
Solo un acierto de Batshuayi pudo haber cambiado el empate a cero en los primeros 45 minutos, pero lo del belga era constante desacierto. Erró la gran ocasión para poner a su equipo por delante en el 18, cuando el propio Coquelin le entregó un balón para correr solo en dirección al portero pero el delantero se escoraba de manera incomprensible hacia la izquierda, para terminar cruzando el balón flojo y mal. Cuando en el 37, después de varias acciones desafortunadas, forzó una amarilla innecesaria, Marcelino dijo basta y puso a calentar a Gameiro, que entraría tras el descanso.
Esa ocasión desperdiciada y un disparo de Kondogbia que parecía gol pero golpeaba en el exterior de la red, fueron lo mejor en ataque de un equipo que volvía a mostrar sus limitaciones para superar líneas y generar acciones de peligro, aunque lo cierto es que apenas daba opción al rival para acercarse a su portería.
Segunda parte de lo mismo
En la segunda mitad, a base de empuje y a medida que arreciaba la lluvia, era el Athletic el que poco a poco volcaba con más insistencia sus propias incapacidades sobre el área de Neto, en especial con la salida de Williams por un desconocido Aduriz y posteriormente Muniain en lugar de uno de sus mediocentros. Marcelino daba entrada a Wass por Soler y una vez más renunciaba al tercer cambio.
Con el partido algo más roto el Valencia parecía dar un paso adelante en los veinte minutos finales, primero con una buena acción de Rodrigo que no encontró el remate de Gameiro y finalmente con la jugada polémica del partido. Un centro de Parejo lo remate duro de cabeza Rodrigo y el balón se estrella en el larguero después de tocarlo el portero, el rechace lo golpea a duras penas de cabeza Kondogbia y el balón acaba entrando en la portería, aunque el colegiado Undiano Mallenco estima que Gameiro interviene en la jugada desde una posición de fuera de juego.
El gol queda anulado y también las protestas de los jugadores del Valencia, que reclaman esa acción y otra inmediatamente anterior en la que pudo haber manos de un jugador del Athletic en el área. Una vez más, ni VAR ni nada.
Al final, el que casi se lleva el partido en el 93 fue el Athletic, con un duro disparo de Raúl García que saca bien colocado Neto. Habría sido el colmo perder, aunque sumar de uno en uno semana tras semana tampoco conduce al Valencia a ninguna parte.
