El Valencia CF no tiene tiempo que perder. La situación, con el equipo el decimoquinto clasificado en la tabla y a solo cuatro puntos del descenso, más bien invita a la urgencia. Bien lo sabe Guedes, que aterrizaba en el aeropuerto de Manises a primera hora de la mañana y, aunque estaba previsto que se presentara en Paterna por la tarde Guedesdecidió ir directo desde el aeropuerto a la Ciudad Deportiva para trabajar y recuperar una sesión de entrenamiento con el objetivo de llegar en las mejores condiciones al partido del sábado contra el Rayo Vallecano en Mestalla tras no jugar ni un solo minuto con Portugal.

Al Valencia CF se le viene encima una avalancha de partidos de alta exigencia. La Juventus, el Real Madrid, el Manchester United, el Sevilla... El más importante, a ojos de los protagonistas, es el del Rayo. Y no por que sea el primer escollo en esta carrera de aquí a final de 2018 sino porque el equipo se juega mucho. En la mente de todos está el partido ante el Leganés a la vuelta del último parón después de empatar ante el United y el Barça. Si se hubiera ganado, consideran, las cosas probablemente hubieran transcurrido de forma distinta. Aquel empate fue un paso atrás y comenzó a minar el estado mental del equipo: muchas preguntas sin respuesta.

El objetivo ahora es cortar cualquier lazo con el bagaje anterior y cimentar una nueva dinámica a partir de la base de confianza que generan las victorias ante Young Boys y Young Boys Getafe. El Rayo es el punto de partida de un reto que va a medir ni más ni menos que las probabilidades de éxito en la temporada y en el equipo le dan un valor específico al partido por todo lo que representa. No se puede fallar, ahora hay mucho en juego.

En el seno del equipo hablan abiertamente de «volver a empezar». La consigna es «resetear» y volver a ganar desde la referencia de la mejoría -sensaciones y resultados. El tono en el día a día ha cambiado con respecto a hace unas semanas. Donde antes había dudas, frustración y tensión ahora hay positivismo, tranquilidad y determinación. Esta nueva realidad se respira en cada gesto, en cada mueca y hasta en las indicaciones de Marcelino. El entrenador ayer aplaudía a sus jugadores en el entrenamiento. Todas sus instrucciones son para reforzar al jugador en positivo. Hay cariño para Kondogbia, para Batshuayi, para Parejo... Hasta para BatshuayiParejoMurillo

El parón ha sido medicinal. Marcelino dio un día de descanso más de lo previsto inicialmente para que sus hombres salieran del bucle, se airearan y volvieran como nuevos. Mina se fue a Galicia, Lato estuvo en Roma, LatoGameiroLa mayoría aprovechó para abandonar el día a día y desconectar. Había que llegar limpios mentalmente a lo que viene ahora.

El técnico prepara el partido ante el Rayo con todos sus jugadores salvo Cheryshev. Neto, que ayer daba el susto con un golpe en el codo, estará listo. Si en los tres últimos partidos Marcelino repitió el equipo de cabo a rabo -salvo el obligado cambio de Parejo por Kondogbia y la entrada de Coquelin.

Una de las cosas positivas que saca el Valencia CF de los últimos encuentros es haber encontrado el camino a partir del bloque con protagonistas muy marcados. El once ante el Rayo tendrá que ver con el de Getafe pero a partir de ahí entrarán en juego más activos, no repetirán siempre los mismos protagonistas para mejorar el funcionamiento colectivo del equipo.