El mejor Valencia CF puede con el mejor Valencia CFSevilla Ese fue uno de los mensajes que Marcelino trasladó en sala de prensa: «Debemos estar convencidos de que podemos ser superiores y ganar». Entre los aspectos que ha trabajado el míster también está la confianza. El Bernabéu frenó en seco el proceso de mejora que estaba experimentando el equipo. El nivel mostrado ante Young Boys o Getafe fija una buena referencia, pero el objetivo es elevarse por encima de esa versión. El bloque de Machín va a exigir un grado superior en intensidad, dinamismo y capacidad de incisión.

Partido enorme ante un adversario que era líder hace dos jornadas y que también busca un golpe de mando. Todo lo vivido y todo lo sufrido ante Atlético, Barça, Juve, Manchester United o AtléticoBarçaReal Madrid. La brecha entre los dos equipos se ha abierto desde el ataque, a través de la eficacia de André Silva, Ben Yedder, gracias a la aportación determinante de Sarabia y Banega. Mina, Rodrigo, Guedes, Soler, Kondogbia y Parejo tienen que prender la llama.

El Sevilla. Al contrario. Hace una semana, el Alavés de Abelardo mostró como clavarle el arpón. El míster asturiano, que emplea una partitura similar a Marcelino, hizo sufrir a los sevillistas con un pressing alto y continuo. Abelardo matizó su 4-4-2 habitual para morder con tres jugadores sobre la defensa de tres del Sevilla. Así, ahogó a Carriço, Kjaer y Sergi Gómez -más Vaclík- subrayando sus carencias en el primer pase. Guedes, Mina y Rodrigo pueden copiar la función. Esa presión intensiva también sirvió para desconectar al eje Mesa-Banega.

Sin el argentino: fin de la historia. La agresividad de Soler (como tercer centrocampista), Parejo y Kondogbia o ParejoCoquelin El Alavés redujó al Sevilla al máximo hasta simplificar al máximo sus recursos. Con Sarabia y Franco Vázquez o Mesa aislados, la única vía de salida fue el juego directo y el pase largo. El dominio de los duelos y las segundas jugadas es obligatorio. Garay y Paulista no pueden dejar respirar a la dupla PaulistaAndré SilvaEl francés se mueve entre líneas y puede arrancar en punta o desde la izquierda. Su función, sacar a los centrales a campo abierto y aprovechar los errores. La presión tiene que imponer la dirección del Valencia. Reducir los espacios y moverse en bloque es clave para romper el circuito entre los interiores y los mediapuntas del Sevilla. El centro del ataque rápido sevillista pasa por generar superioridad por fuera y proyectarse desde las bandas, centrar y llegar. El Valencia está obligado a matar muriendo. El ejercicio reclama una actuación completa, de principio a fin.