Cuando el árbitro señaló el final del partido, Dani Parejo celebró con rabia una victoria importante. El capitán adelantó al Valencia CF tras una magnífica asistencia de Cheryshev, pero no se pudo celebrar el triunfo ante la SD Huesca hasta el último suspiro, cuando la parroquia de Mestalla explotó de alegría con el gol de Piccini con el que se fijó el 2-1 definitivo en el tiempo de descuento.

"Sufrimos para ganar, pero ganamos. Momento de desconectar, reflexionar y volver con las pilas cargadas", afirmaba el capitán tras el partido, momento en el que el presidente del Valencia CF le regaló una camiseta conmemorativa al haber superado los 300 partidos oficiales con el club, una cifra difícil de alcanzar y que le permite superar a Roberto Gil, estando entre los 30 futbolistas de la historia del Valencia CF con más partidos. Su gol a la SD Huesca fue el número 47 como valencianista.