Santiago Cañizares fue uno de los grandes protagonistas de la tarde este domingo en la que el valencianismo celebró en Mestalla los cien años de historia del Valencia CF. Cañizares había anunciado días antes que estaría en el estadio pero no jugaría el partido de las leyendas entre el Valencia CF y la Selección Española, por motivos físicos y psícológicos, como él mismo dijo, "siento defraudar a quien me quería ver en la portería, aunque lo que hubiera visto dista mucho de lo que vio".

El que fue capitán del Valencia CF participó en los actos previos y en la animación del partido pero no estaba previsto que jugara y de repente, a minutos del final del encuentro, la megafonía anunciaba que saltaría al césped de Mestalla. Lo hizo en medio de una de las ovaciones de la tarde y poco después, en los micrófonos de la Cadena Ser, explicaba qué y quién le hizo cambiar de opinión:

"Me había comprometido a vestirme para la foto inicial, pero a medida que ha ido pasando el partido he comenzado a notar que quizá tenía que hacer un esfuerzo y jugar. La primera que me lo ha transmitido ha sido mi mujer, que estaba en la grada, y mis hijas. Mi mujer estaba al lado del banquillo, y me ha dicho mirándome a la cara 'tienes que jugar'. Y luego mis hijas, que estaban ahí las cuatro, y ya se sabe que a los hijos, y más después de lo que ha pasado en mi familia, no les puedo decir que no. Entonces he llegado a un pacto de que iba a jugar los últimos diez minutos, y he entrado. Me han chutado dos veces, la cabeza te va mucho más rápido que las piernas y en las dos veces he tropezado. Mi hijo me ha preguntado 'papá qué te pasaba en las botas', y yo le he dicho que no son las botas, son las piernas, que ya no tienes coordinación ni cuádriceps para impulsarte, y además yo nunca me había puesto en una portería desde que me retiré y eso que he recibido ofertas económicas muy importantes para jugar este tipo de partidos fuera de Españza, en países árabes... donde dices, vas allí una semana y juegas un partido y te pagan un pastón, pero no, ya iré con mi mujer. Nunca me había puesto en una portería. Por ejemplo, Juan Señor, que lleva la selección de las leyendas, me llamó y me dijo que además de ser una bonita experiencia lo pagan muy bien, y que la selección va justa de porteros€ Pero es que yo dejé de jugar y cerré un ciclo de mi vida. Yo jugaba al fútbol con mucha pasión y no sé jugar de otra manera€ Si ha habido una pelota que ha salido fuera y como íbamos perdiendo 2-1 he ido corriendo a por ella como si nos estuviéramos jugando la Champions en el empate. Pero ya está, lo de menos es el rato que he estado en el campo, porque lo más importante es lo que he recibido. No te puedes imaginar, yo no lo esperaba, aunque es injusto decirlo porque de Mestalla te puedes esperar cualquier cosa, esa es la realidad, pero creo sinceramente que ha sido tanto que creo que no lo merezco, creo que nadie merece tantísimo cariño, nadie ha hecho obras tan importantes como para que tanta gente se saque el corazón de la camisa, te lo muestre y te lo regale, no creo que exista ese tipo de persona, sinceramente creo que es demasiado. Ha sido muy bonito. Casualmente, al final han empezado a hacer una vuelta al campo y yo que estaba con mis hijas que desde el primer momento querían bajar al campo, me he quedado un poco retrasado y he dado la vuelta con ellas y ha sido absolutamente emocionante hasta el punto que se me han saltado las lágrimas. Cuando he podido dirigirme a la gente antes del partido he dicho que habrá habido muchas tardes en Mestalla y seguramente mucho más tensas, muchos partidos muy bonitos otros más duros pero en los cien años de historia del Valencia CF no ha habido un partido como este, y personalmente, yo he ganado ligas con el Valencia CF y he levantado una liga en Mestalla, pero como hoy, el sentimiento que había en Mestalla no los he vivido en mis diez años de jugador del Valencia CF incluso levantando títulos".