Marcelino García Toral escondió con celo las cartas de la delgada baraja que le han dejado las lesiones de Denis Cheryshev, Geoffrey Kondogbia y la sanción de Denis CheryshevFrancis Coquelin. Desde que el ex del Arsenal vio de forma inesperada en los últimos minutos del partido frente al Villarreal la amarilla que le impidió viajar este miércoles con sus compañeros a Londres, el entrenador le ha dado vueltas en su cabeza a la manera de equilibrar al equipo con la ausencia de los dos mediocentros defensivos de la plantilla. Daniel Wass, Carlos Soler... o los dos a la vez para acompañar al capitán Dani Parejo en un sistema con 'trivote', tres centrales, dos carrileros y dos delanteros. Esta noche el '10' encarará una de sus citas más importantes con la camiseta blanquinegra, el reto de comandar la nave a la final europea de Bakú, a dos finales, algo que no ha pasado en 100 años de historia.

Como reflejaba este miércoles SUPER, a su clásico 4-4-2 se une el 5-3-2 como alternativa para «contrarrestar» en defensa la «precisión» y «profundidad» ofensiva del Arsenal. El partido se presenta como una interesante batalla táctica entre Unai Emery, ex del Valencia, y Marcelino. Precisamente, una de las virtudes del vasco esta temporada con los gunners está siendo la de adaptar a los suyos dentro de diferentes sistemas dentro siempre de la misma filosofía. Algo parecido sucedería hoy con el Valencia si, a la postre, su entrenador da el paso de un cambio de sistema para blindar el esqueleto en la zona central. El regreso de Cristiano Piccini para ocupar la parte diestra de la defensa «aumenta las posibilidades de mediocampo para elegir», confiesa Marcelino.

El equipo de Unai Emery destrozó al Nápoles solventemente al contragolpe en los cuartos de final con un 3-4-1-2. Un sistema por el que la prensa inglesa también apuesta para esta noche en el equipo londinense. Özil hace de enlace entre la media y los dos proyectiles de ataque: Aubameyang y Lacazette. El técnico conoce a su equipo y, conforme pasa la temporada, le va poniendo argumentos que considera adecuados para que sea competitivo y ganador. Teniendo una filosofía, tratamos de adaptarnos a lo que tenemos. La filosofía de Unai es similar a la de sus anteriores equipos, puede plasmarla a través de un dibujo distinto y las características de sus jugadores. No creo que para nosotros ofrezca más o menos dificultad. Independientemente del sistema, lo que lo hace fiable es la forma de desarrollarlo a través de la colocación espacial», explica Marcelino.

Con un sistema u otro, la idea del Valencia pasa por enrocarse en defensa y ser letal cuando pise las proximidades de Cech. «En casa el Arsenal ataca mucho y bien, así que tenemos que defender muy bien, proponer en ataque y tener clara la idea de contraataque. El partido puede desarrollarse con un mayor ataque del rival que nuestro, así lo veo. Ellos atacan bien y mucho, nosotros defendemos bien y mucho, pero esperemos que en esa mezcla les superemos», añade el míster del Valencia, que no desvela si estudia un plan alternativo para contrarrestar «el arma peligrosa» de los ataques verticales del Arsenal. «El Arsenal roba en campo rival con una presión muy alta, lo que hace que cuando recuperan en medio campo sus contras sean un arma muy poderosa. Tienen jugadores con buen pie, potentes en los espacios como Aubameyang. Debemos ser cuidadosos para evitar estas acciones. Tenemos un plan previsto, el de tener el máximo equilibrio posible tanto en ataque como en defensa. Si logramos que el equipo sea lo equilibrado que solemos ser, la eliminatoria será igualada», afirma.

Xhaka-Torreira, pareja intensa

Otra de las razones por las que Dani Parejo puede contar hoy con la ayuda como lugartenientes de Soler y Wass es la fuerza e intensidad de la pareja Torreira-Xhaka. El capitán afronta con ánimo el reto de esta noche en el Emirates y apuesta por salir a «divertirse para sacar el 100% de uno mismo». ¿Qué dirá Parejo en el vestuario antes de enfrentarse al Arsenal? «Que hay que ser conscientes de que la eliminatoria dura 180 minutos. Esperamos un partido similar al del Wanda... Diré a mis compañeros que, a día de hoy, yo no he jugado ninguna final y si queremos jugar una final europea lo tenemos que demostrar», comenta.