El Valencia CF está negociando con el FC Barcelona el intercambio de Neto y Cillessen, es decir, que el brasileño juegue en el Camp Nou la temporada próxima y el holandés en Mestalla. El «trueque» -así lo definen de hecho las personas que están con la operación- va adelante y ayer a última hora fuentes oficiales ya daban por sentado que se va a hacer. Es cuestión de horas, de días o de semanas, pero la operación tiene todos los visos de progresar y acabar concretándose. En ese sentido, convicción total. Ese cambio de cromos en la portería va por una parte -las bases están claras, hay sintonía en cuanto a cantidades y predisposición entre todos los actores- pero además, de por medio, el club valencianista está intentando que en la operación entren otros dos jugadores del Barça. Se trata de Denis Suárez y Rafinha, dos jugadores que no tienen un peso específico para Valverde: el gallego reforzaría la banda izquierda y el brasileño, un abanico lleno de posibilidades, vendría a encajar como recambio de Parejo o alternativa eventual a un segundo punta. Esos cuatro son los nombres propios que hay ahora mismo en las conversaciones mantenidas entre los clubes.

Cómo acabaría resolviéndose finalmente la operación ahora mismo es todavía un enigma. Como dicen los partes médicos, está pendiente de evolución. Y es que esta situación tiene ciertas similitudes con la de hace tres veranos, cuando el Valencia CF y el Barcelona tenían conversaciones abiertas por varios asuntos. El resultado fue el siguiente. El 25 de julio André Gomes puso rumbo al Camp Nou, cuatro días después aterrizó Martín Montoya -la versión oficial hablaba de que llegaba con la carta de libertad- en Mestalla y en las últimas horas de mercado, un mes después, Paco Alcácer marchaba a Barcelona en un traspaso en el que se incluyó la cesión de Munir. No solo no se concentró todo en una misma operación de mercado sino que además las fechas fueron distintas a excepción del trueque de delanteros. El Valencia CF tiene mucho trabajo hecho respecto a Denis Suárez. El gallego es un jugador que pese a que no ha tenido un gran protagonismo en el Barça en las últimas temporadas tiene muchas novias en el mercado pero el 'factor Marcelino', que exprimió todo su potencial y sacó su mejor rendimiento en la temporada 2015/16 cuando estaba en el Villarreal, es clave en todo este asunto. Más allá de la relación de confianza que une a ambos protagonistas, Denis reconoce en el asturiano una garantía de éxito, un camino hacia su mejor versión y eso en año de Eurocopa -el futbolista admitió días atrás en una entrevista con El Larguero de la SER que tiene esperanzas puestas en engancharse a la selección absoluta- es importante.

Tira y afloja

El tema de los porteros está claro y el de Denis es un tira y afloja como es el de Rafinha. El centrocampista brasileño ha visto cómo su papel en el Barça ha ido decreciendo en la medida que sus dos roturas de ligamento cruzado y una de menisco han condicionado su continuidad, en la 2017/18 ya fue carne de cesión y esta temporada solo ha jugado 8 partidos. Hasta que se rompió el cruzado jugó bastante -348 minutos en los ocho partidos- pero no tiene sitio. Es una oportunidad y el Valencia CF está decidido a atacarla. Hay pelea por Denis Suárez, Rafinha y paralelamente también por Maxi Gómez. El Celta se pone duro y exige una cantidad cercana a la cláusula de 50 millones de euros y el Valencia CF, que cuenta con la voluntad del jugador -como en el caso de Denis Suárez- y la llave de Santi Mina, juega sus bazas en este tira y afloja. Mucha tela que cortar.