Carlos Soler fue injustamente uno de los señalados en la derrota de la Selección Española. El internacional del Valencia CF fue el autor del penalti (3-1) sobre Orsolini que detectó el VAR y aprovechó Chiesa desde los once metros. Un error que asume el jugador, pero que no empaña su notable actuación en el debut de la 'Rojita'.

Carlos se echó el equipo a la espalda cuando las cosas peor pintaban en el partido, asumió la responsabilidad del peso que tiene en el equipo y solo sus ganas de ayudar le jugaron una mala pasada. Pecó de exceso de intensidad. Solo eso. El jugador está tranquilo y el seleccionador Luis de La Fuente aún más. Carlos es uno de los 'capos' de la Sub-21 como así ha demostrado en la fase de clasificación y en el propio debut contra la 'azzurra' y seguirá siendo titularísimo en el once de esta tarde contra clasificaciónBélgica. España necesita ganar sí o sí para seguir vivo y buena parte de las opciones de España de estar en las semifinales del Campeonato de Europa pasa por su botas.

Si algo caracteriza a Carlos es «su espíritu de superación y su capacidad mental» para responder siempre que se encuentra contratiempos por el camino. Hace bien poco sufrió una parecida. Se marcó un gol en propia puerta en el Derbi contra el Levante y, lejos de bajar los brazos, solo necesitó un minuto para resarcirse del error para dar una asistencia de gol a Gonçalo Guedes y minutos después provocar con un tiro al palo el gol de Santi Mina. Soler siempre se levanta ante situaciones adversas como la que atraviesa esta Sub-21 sin margen de error y obligada a sumar 6 puntos de 6 contra Bélgica y Polonia. El nuevo formato de la Eurocopa Sub-21 -solo pasan a semifinales los primeros de grupo y el mejor segundo- no admite más tropiezos. Carlos, más allá de asustarse, asume el resto con valentía. Está acostumbrado a convivir con la presión y rendir en los momentos importantes. Lo demostró en el tramo decisivo de la temporada con sus goles de Champions al Alavés y el Valladolid en las dos últimas jornadas de LaLiga y solo una semana después con la asistencia de gol a Rodrigo en la final de la Copa con aquella 'pasada' a Jordi Alba para la historia.

Su estatus en la Sub-21 esta fuera de toda duda. Soler es uno de los intocables de la selección. Se lo ha ganado a pulso durante los dos últimos años. Con el de Italia lleva 16 partidos consecutivos en los que ha logrado cuatro goles y seis asistencias siempre como titular. No empieza en el banquillo precisamente desde el verano de 2017 en la última edición de la Eurocopa. De hecho, fue el jugador con más minutos en el clasificatorio y el único junto a Oyarzabal y Borja Mayoral que jugó los diez encuentros. Esta tarde está previsto que repitan los tres.

Izquierda, más difícil todavía

¿Jugará por la derecha o la izquierda? Es la duda. El domingo empezó en la derecho como con Marcelino, pero a partir del 8' intercambió la posición con Oyarzabal. Carlos ya actuó en la izquierda en un amistoso (3-0) contra Austria con golazo a la escuadra y su primer doblete internacional. Desde el domingo solo piensa en ayudar con goles, asistencias y trabajo frente a Bélgica. Porque Soler siempre se levanta.

Manu Vallejo espera desde el banquillo sus primeros minutos

El delantero del Valencia CF, Manu Vallejo, tiene muchas esperanzas depositadas en el segundo partido del Europeo. El gaditano no participó contra Italia y espera tener sus primeros minutos contra Bélgica saliendo desde el banquillo. Ni Borja Mayoral ni Rafa Mir -el recambio del '9' en la segunda parte- marcaron ante los anfitriones. La idea de Luis de La Fuente es mantener el bloque de la primera jornada.

La principal duda es Fabián Ruiz

El mediocentro del Nápoles tuvo que retirarse al descanso por unas molestias en un cuádriceps y el seleccionador no parece dispuesto a arriesgar con él. Pese a que no parezca una lesión grave, es probable que descanse contra Bélgica y le sustituya Pablo Fornals en un centro del campo en el que Mikel Merino apunta a la titularidad con Ceballos. Jorge Meré será titular a pesar de la brecha en la cabeza y nueve puntos que sufrió contra Italia.