El nombre de Rafinha Alcántara, aún sin el visto bueno del máximo accionista, continúa ocupando un lugar preferente sobre la mesa de refuerzos sobre la que trabajan Mateu Alemany, Pablo Longoria y Marcelino García Toral. Los tres, director general, director del Área Técnica y entrenador, hablaron ayer largo y tendido en la Ciudad Deportiva sobre el estado del mercado del Valencia CF. La incertidumbre sigue reinando en cuestiones prioritarias como son las posibilidades de lanzarse a por un sustituto de Rodrigo Moreno o el citado caso Rafinha. Tanto en una como en otra la situación puede alargarse hasta los últimos momentos de un mercado que cerrará el lunes 2 de septiembre.

La lesión de Carlos Soler hasta entrado el mes de octubre alimenta, más si cabe, la necesidad de potenciar cuanto antes el centro del campo con el futbolista del Barcelona. Alemany, Longoria y Marcelino mantienen firme dicha posición en cuanto a sus intentos para que Rafinha acabe vistiendo la camiseta del Valencia CF. Según explicó Marcelino hace una semana, la única vía por la que Peter Lim aceptaría la llegada del brasileño es una cesión. Es la alternativa a la que se agarra Marcelino, quien considera que el contexto que vive el equipo, con la baja por lesión de Soler y la sanción de Francis Coquelin, evidencia la urgencia de una pieza de la categoría y la experiencia de Rafinha en la Liga para un equipo que tendrá que jugar cuatro competiciones.

Precisamente, las circunstancias actuales del Barça, con jugadores de ataque con problemas físicos, y el destacado papel de Rafinha en la primera jornada provocan que hasta final de mercado no se concrete una salida, ya que Ernesto Valverde está encantado con el rendimiento del de Sao Paulo. Para Marcelino es la opción número uno y no arroja la toalla para que se dé la cesión. Una condición que el FC Barcelona se ha vuelto a plantear, ya que el zurdo finaliza contrato en 2020.

Por otra parte, pese a las reuniones en Paterna, los ejecutivos en València CF desconocen en estos momentos si la lesión de Soler puede tener un efecto positivo en lo referente a un cambio de perspectiva en Peter Lim para el fichaje de Rafinha. Lo que es seguro es que, mientras no se concrete ningún refuerzo en la línea de medios, la ausencia de Carlos Soler en los onces y las convocatorias significa una puerta de esperanza en la banda derecha para dos valores como son Ferran Torres y Kang In Lee. La oportunidad de uno y otro para dar un paso adelante y demostrar al técnico sus virtudes para jugar, pese a su edad, en un grande la Liga. Precisamente, ver a ambos con más minutos de juego es una de las voluntades de la propiedad que ha trascendido de las reuniones en Singapur y la crisis vivida este verano.