Sólo han pasado ocho días des de su aterrizaje en el Valencia CF y Albert Celades -el sustituto de Marcelino que eligió Peter Lim- acumula ya dos partidos y seis entrenamientos. Pese a lo frenético del calendario, el nuevo técnico opta por una transición tranquila en la que aprovechar los mecanismos positivos de la anterior etapa y, poco a poco, ir dando pinceladas referentes a su idea de fútbol. Entre las pocas consignas que estos primeros días han recibido los futbolistas destaca la de alternar el ataque directo con un juego ofensivo de combinaciones más elaboradas. Más pacientes. Un concepto táctico en el manual de los entrenadores que se han criado en la filosofía del Barça y, a juicio de Celades, un recurso con el que perforar a rivales que se encierren atrás o controlarlos mejor con la posesión del balón.

El ex seleccionador sub-21 no desea ejecutar una revolución desde el primer día, menos aún, tras comprobar el bajo estado anímico que ha reinado en el vestuario. La naturaleza del siguiente rival en Mestalla, no obstante, precipitará el domingo una versión del Valencia más parecida a la que Celades proyecta en su cabeza. Precisamente, después de empezar la aventura con dos platos fuertes como Barcelona y Chelsea, el Leganés de Pellegrino servirá de examen a ese nuevo sello ofensivo que el técnico catalán pretende dar a los blanquinegros. El conjunto 'pepinero', igual que el Valencia, ha encajado en este inicio de Liga siete goles, lo que le ha hecho perder poder competitivo siendo el colista antes de jugarse la quinta jornada. Con todo, el 'Flaco' intenta la reconstrucción de un equipo que necesita ensamblar nuevos jugadores desde la solidez y el compromiso defensivo.

La plantilla del Valencia, que apenas ha sufrido variaciones, es consciente de la dificultad que supuso el pasado curso competir con el Leganés de Pellegrino. Los dos partidos de Liga acabaron con empate a uno... y en casa gracias a un gol in extremis de José Gayà. Fue el 20 de octubre de 2018, fechas en las que el equipo atravesaba una seria crisis de resultados en la primera vuelta de la competición, y un partido modelo de los que sin espacios a atacar se le atragantaron al equipo de Marcelino. Espeso.

Este próximo domingo el guion se presenta con similitudes evidentes frente a un equipo que juega sin rubor con tres centrales en una zaga de cinco: Bustinza, Omeruo y Siovas. Con cuatro derrotas en el casillero no se esperan alegrías en un Leganés que no negocia la intensidad. Constatadas mejoras en la concentración, el orden y la estrategia en el tránsito del Camp Nou a Stamford Bridge, ahora al Valencia le llega la hora de dar un paso adelante. El momento de que Celades consiga que los jugadores desarrollen sobre el césped de Mestalla los toques propios de su estilo futbolístico. En esta misión un futbolista que a la postre ganará protagonismo en relación con el pasado es Kang In. Las modificaciones a la hora de atacar con un 4-3-3 o 4-2-3-1 implementan la figura de un mediapunta para partidos donde haya que dominar al adversario.

El resultado es ley en el fútbol. Aún así, ante el Leganés otros parámetros como el número de pases y ocasiones de gol pondrán a prueba la evolución con el balón de un Valencia que en este inicio no ha superado todavía a nadie en términos de posesión y, únicamente, al Mallorca en el caudal de pases.