Gaizka Garitano (44 años) tomó el banquillo del Athletic tras el paso -plomizo- de Toto Berizzo. No era una apuesta fácil. El técnico de Derio llegaba con el aval de su ADN, conocía la casa como jugador y entrenador, pero con la duda de sus últimos proyectos fracasados en Deportivo y Valladolid. El entrenador que comenzó el milagro del Eibar, al que lideró, en tres ascensos consecutivos, de Segunda B a Primera. Su impacto fue inmediato y el curso pasado estuvo bien cerca de los puestos europeos.

Garitano ha dado sentido al proyecto, buscando el mejor contexto para Williams o Muniain, potenciado el rendimiento de fichajes que no arrancaban como Yuri Berchiche, Ander Capa o Dani García (precisamente los conocía perfecto de su etapa en el Eibar). También ha potenciado a valores de Lezama como los Unais, López y Simón. En defensa tiene tres centrales con nivel de Selección: Yeray, Iñigo y Unai Núñez, que estuvo en la última lista. Los tres comparten condición y cuadran como pareja. La sombra de Laporte se ha quedado en poca cosa. Más trascendente es el rol de Raúl García. El mediapunta navarro es intensidad pura, pegada (4 goles), liderazgo... es Athletic. Aritz Aduriz (38 años) colgará las botas a final de temporada y Raúl García tomará su relevo como alfa. El canterano de Osasuna siempre es una pesadilla para el Valencia.. ¿Los goles de Aduriz? La responsabilidad va a recaer y ya pesa sobre el lomo de Iñaki Williams. Gran reto.