El Valencia CF y el Real Betis cuentan ahora mismo con un escaso centro del campo disponible para afrontar el próximo partido del sábado. Una problemática similar que obligará a los técnicos de ambos conjuntos a tomar cartas en el asunto. El choque nos ofrece dos equipos con pocas opciones. Las bajas de Kondogbia y Coquelin obligarán a Celades a usar a Daniel Wass como única alternativa natural para acompañar a Parejo. Estrictamente hablando sobre los pivotes del centro del campo, en el cuadro verdiblanco las lesiones de Javi García -rotura en el muslo derecho- y William Carvalho, que sufre una hernia discal y no juega desde la octava jornada, dejan huérfano a Guardado.

En el Betis son conscientes de que, además de las lesiones, la actual situación viene precedida de las decisiones tomadas en el mercado estival, donde Rubi no consiguió el Marc Roca que pedía. Con la baja de Carvalho, la falta de un pivote corpulento y físico que tapone el centro del campo es determinante. Mientras que el Valencia cuenta con el comodín Wass, en el Villamarín esa alternativa es inexistente. Los béticos podrían saltar al césped con Guardado escudado por Marc Bartra, adelantando su posición como hizo en el derbi sevillano, o bien con el mexicano junto a Canales y Nabil Fekir, ambos jugando en una línea más adelantada.

La secretaría técnica del Betis está buscando soluciones de cara al mercado de invierno y pretendería incorporar dos refuerzos para el centro. En el punto de mira se encuentra Emre Can, que sigue sin ser importante para Maurizio Sarri en la Juventus y por quien se apostó fuerte en verano. El jugador de origen turco parece tener expectativas más altas y cuenta con el interés del PSG. Otra alternativa que suena en Sevilla es la del serbio Njegos Petrovic, que no es indiscutible para el Estrella Roja y podría ofrecer equilibrio y polivalencia en el esquema de Rubi.

Veremos de qué forma plantea el entrenador bético el encuentro y qué equipo se maneja mejor sin murallas en el centro del campo, en un partido clave que podría colocar a los valencianistas en puestos europeos o alejar al Betis de la zona del descenso, del que sólo se encuentran a cuatro puntos por encima.